Neutropenia Febril.

Capítulo 1.

Aquella noche no parecía ser diferente a las demás, con excepción de la, ahora, más usual compañía que tenía eritrocito. En aquellas horas, el trabajo de trasportar oxígeno se calmaba y descendía ligeramente la presión sanguínea, a ella le gustaba seguir con su trabajo porque de noche, se oscurecía todo y era iluminado por las linternas que las células encendían y colocaban en sus ventanas, dándole a ese mundo una atmósfera de paz y tranquilidad.

- Me gustan estos paseos nocturnos - sonrió eritrocito, empujando su carrito con CO2, es decir, Dióxido de Carbono. Neutrófilo se encontraba acompañándola, orgulloso de ver cómo ya ha circulado cinco veces seguidas sin perderse y va por la sexta. Toda una racha. - Y gracias por venir conmigo, pensé que querrías descansar.

Leucocito sonríe ligeramente.

- Durante altas horas de la noche, el cuerpo se encuentra más vulnerable, por lo que debemos estar siempre alerta.

Eritrocito abrió los ojos, sorprendida y asintió.

- Si, tiene mucha lógica - luego frunce el entrecejo pensando en algo.- Pero, señor Leucocito, durante todo este tiempo que llevamos caminando, usted es el único neutrófilo que he visto.

- Si, como dije el día que nos conocimos, este cuerpo ha estado con las defensas bajas. - ambos giran a la izquierda por una esquina- y es preocupante, cada vez es menor la cantidad de leucocitos y linfocitos, justo ahora estamos en estado de neutropenia.

A eritrocito no se le escapó que él recuerde la vez que se conocieron. Aquello lo consideró muy tierno. Se estiró como pudo y le dio un pequeño beso en la mejilla, sorprendiéndolo por completo.

- Suba esa guardia, señor leucocito - sonrió al notar el pequeño rubor en las blancas facciones. - Me alegra que sigas aquí, el otro día vi a Senpai hablando con el leucocito 2626, parecían discutir sobre...

Entonces, un eritrocito pasó corriendo a su lado, empujándola y provocando su caída.

- ¡Corran! - gritó el eritrocito y siguió con su carrera. Neutrófilo ayudó a eritrocito a levantarse, fijándose que no estuviera herida.

- ¿Estás bien? - le dijo, acunando su rostro entre sus manos mientras, con mirada minuciosa, la inspeccionaba en busca de heridas.

- Yo... Emmm... Sí, eso creo. - la intensa mirada del Neutrófilo sobre sí la incomodó ligeramente, por lo que, con suavidad, retiró las manos de éste de su rostro y les dio un pequeño apretón antes de soltarlas.

Entonces, el glóbulo blanco miró tras de ella, en dirección hacia el eritrocito que chocó provocando su caída. Ambos continuaron caminando, pero leucocito se encontraba pensativo.

- Uff, tanta caminata me dio calor - comentó eritrocito, mientras pasaba el dorso de su mano por debajo de su rojizo flequillo para secar unas pequeñas gotas de sudor de su frente.

- No creo que sea eso - respondió el otro, notando que, en efecto, había empezado a aumentar la temperatura del ambiente. Su cuerpo se encontraba en estado de alerta. Algo no estaba bien. Llegaron a la aurícula derecha , en el corazón, cuando notan algo inusual.

- Señor leucocito, es mi imaginación o ¿Acaso el corazón se aceleró?

Ambos escuchaban el golpetear del corazón, había incrementado su velocidad de movimiento y más eritrocitos empezaron a llegar con prisas.

- está aumentando la presión sanguínea. - murmura leucocito, mientras comenzaban a andar más rápido. Luego, emprenden camino por la arteria pulmonar, para llegar a los pulmones, donde eritrocito intercambiaría el CO2 por O2 y, de regreso al corazón, ambos iban con paso rápido, debido a la cantidad de eritrocitos empujando y llevándolos por delante.

- Aquí Neutrófilo U1146 - dice el leucocito por su walkie-talkie. - ¿Alguien sabe qué sucede?

- U1146, aquí U2626 - sonó en respuesta - Parece ser que nos encontramos en un estado de fiebre.

- ¿Sabes la razón? - pregunta, al instante que se interpone entre eritrocito y los demás, ya que uno estuvo a punto de chocarla con su carrito. Recibió una pequeña reverencia en agradecimiento.

- No sé si te has dado cuenta -dice - pero creo que nuestro grupo es el único de leucocitos en todo el cuerpo - si el neutrófilo hubiera podido palidecer más, lo habría hecho - Tal parece que nos encontramos... En una Neutropenia Febril.

La neutropenia febril se caracteriza por el aumento de temperatura oral mayor a 38 grados centígrados, acompañado con escalofríos y un recuento de neutrófilos menor a 500 por microlitro de sangre; el cuerpo es más susceptible a padecer de invasiones bacterianas en estado de neutropenia, especialmente gram negativas.

El receptor sensorial del leucocito se activó, poniéndolo en estado de alerta.

- Eritrocito, tengo que irme - dice, tratando de agudizar su vista en dirección a donde su receptor le indica. Ella asiente y antes, le da otro pequeño beso en la mejilla al neutrófilo, quien la mira sonrojado nuevamente.

- Ve a tras ellos. - dice con una sonrisa.

Él, todavía un poco aturdido, asiente y se aleja corriendo.

En un momento dado, neutrófilo se detiene.

Había llegado al tracto digestivo y su receptor emitía un sonido más fuerte. La bacteria se encontraba más cerca de lo que se había imaginado.

Un golpe le llegó por detrás, lanzándole contra una pared. Apenas tuvo tiempo de levantarse cuando unos tentáculos lo sostuvieron sobre el piso, inhibiendo su capacidad de moverse. Uno de éstos, tomó su daga.

- Vaya vaya - una voz escalofriante empezó a hablar - Ya decía yo que se estaban tardando.

Cuando neutrófilo levantó la cabeza, alcanzó a divisar una figura vestida de verde, con una sonrisa que espantaría a cualquiera.

- No... No te saldrás con la tuya. - trató de decir el leucocito, siendo apretado todavía más por aquellos tentáculos, provocándole un gemido de dolor.

- ¿Es que no te has dado cuenta? - respondió la bacteria. - Ya ganamos. - suelta una risa que le produce un escalofrío en la columna - Los tenemos a ustedes atrapados. Hemos aprovechado su descenso en cantidad entrar en este cuerpo, no podrán someternos a nosotros como lo hicieron anteriormente.

- Q... Quién...

- Disculpa mis malos modales - el tentáculo que sostenía el cuchillo del neutrófilo se acercó peligrosamente al cuello de éste. - Me llamo Escherichia Coli y no seré uno de sus esclavos.- Acto seguido, clava el cuchillo en el abdomen del neutrófilo, haciéndolo gritar.

- Nuestro reinado apenas comienza.

Fin capítulo 1.

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Hola! Es mi primer fanfic de Hataraku Saibou, una de las cosas que quiero estudiar <> es biología y escribir sobre esto en un fanfic es simplemente... Perfecto! Espero les guste ^^ este fanfiction contará con dos o tres capítulos, así que puede ser mas considerado un two-shot o three-shot <> si alguno de ustedes es médico, biólogo o simplemente está mas informado que yo en este ámbito y ve que cometo algún error, no duden en decirme! Estoy aquí para aprender ^^

En fin, basta de cháchara, ¿Merece el primer capítulo, de mi primer fic de Hataraku Saibou, algún comentario? :3