I. Distancia.

6.5K 494 106
                                    

(Hace muchos años)

- ¡Haya-kun! ¡Vamos a jugar, a jugar! -pedía el niño albino, primo de Hayato Shinomiya.

- No puedo, Even.  - Le respondió un desanimado Hayato.

- ¿De nuevo?

- Estoy enfermo otra vez. No quiero que te enfermes.

- Puedo usar la mascarilla negra de nuevo. 

- Siempre que estás conmigo tienes que usarla, ¿no te enfadas?

- La usaré todos los días, cada hora, si así puedo acompañarte. No me gusta verte solo, Haya-kun. Tampoco me molesta la mascarilla, me miro cool.

- ¿Cool?

- ¡Es una palabra en inglés! Significa genial. Eso creo... ¿Vamos a jugar? - se desvió del tema rápidamente, animando a Hayato Shinomiya a salir aunque afuera estuviese frío y hubiera mucha nieve.

Los dos terminaron enfermando, pero se habían divertido bastante. 

     Pasó un tiempo, y Even se había acostumbrado a llevar puesta la mascarilla - de color negro- siempre. Ahora era raro verle el rostro.

Pronto toda la familia se acostumbró a verlo así todos los días. Y cuando Even creció, era una sorpresa para cualquiera de su familia verlo sin la mascarilla.

- ¿Quién eres?

- Ah... Soy Even...

- ¿Eh? ¿Even? O-oh, perdón, tenía mucho sin verte el rostro por completo. Estás muy guapo.

- Gracias, tía.

Y así pasaban los días.

La unidad entre el hijo único de los Shinomiya con el hijo mayor de los Grieg era magnífica. Parecían inseparables.

Pero entonces...

Una mala noticia llegó en ciertos días, cuando Hayato tenía que empezar a estudiar preparatoria; La familia Shinomiya se mudaría a Japón. 

La reacción no fue favorable en ninguno de los dos primos. Pero ¿qué podían lograr oponiéndose?

Era por el bien de la familia Shinomiya.

- Mm....

- ¿Pasa algo, Even?

- Ahh... Nop.

- ¿Seguro?

- No.

- ¿Estás molesto?

- Tal vez.

- Podrías ir a visitarme.... Aunque, creo que no habría por qué. Tío Ruben siempre sigue a mi mamá, así que tal vez terminen mudándose a Japón también. 

- ¡Tienes razón! - admitió ahora animado.

- Si llegas a transferirte a mi escuela no sé si te dejarían entrar con el cabello tan largo. Tu obsesión por ese personaje es algo... Ay, no sé. 

- No es obsesión, es amor del más puro. Y teniendo la oportunidad divina de parecerme a él no desaprovecharé esto.

Suspiro. - Lo que tú digas.

(Algún tiempo después)

Shinomiya Hayato y su familia ya estaban en Japón, se habían instalado cómodamente en Tokyo. Prepararon la transferencia de Hayato y dejaron pasar el tiempo.

[PAUSA] ¡¿El primo de Shinomiya-kun?! - Watashi Ga Motete DousundaDove le storie prendono vita. Scoprilo ora