Ａｍｂｒｏｓíａ [COMPLETA]

Preludio

El Louvre ha perdido una de las más bellas obras de arte de la historia, todos están maravillados ante su existencia, ¿alguien ha tenido el placer de cruzar su alma con la suya?

Yo la he visto pasear por las calles de la ciudad, su cabello alborotado por el viento primaveral, sus ojos irradiando más luz que todos los astros del universo unidos en un sólo lugar y su sonrisa robando más corazones que cualquier par de orbes mortales, incluyendo el mío.

Su cuerpo es similar a un montón de constelaciones, que llevan su nombre, algunos testimonian que es similar al oro puro, yo sólo sonrío, su valor no corresponde a este mundo, ni a riquezas banales, pertenece a una dimensión a parte, donde la belleza nació con ella y las estaciones cambian cuando camina, sus manos están hechas de los rayos más suaves de la mañana y sus caderas son el cable a tierra de cordura.

Intentaron encontrarla, pero no lo lograron, trataron de guardarla para sí mismos, pero ella no es de nadie, ni de este tiempo, ni de mí, ni de la vida, no pertenece a nadie. Ella es libre, se sienta donde el sol sale y se acuesta donde la luna aparece, yo la vi peinar sus cabellos en las nubes, rodeada de mariposas azules, con su aire de diosa, con su barbilla elevada.

La vi pasar como una estrella fugaz y pedí un deseo, mis secretos están en sus comisuras y su elixir es más adictivo que la nicotina. Ella es ambrosía.