Bajo la lluvia

423 20 1
                                    

La chica se acercó con una sonrisa, pero solo miraba a Khea.
-Que van a pedir?- Dijo poniendo la punta de la lapicera sobre el anotador y mirando de arriba a abajo a Khea.
Khea pidió y luego hable yo.
La chica jamás me miro, solo lo observaba a él.
Se alejó y comencé a reír.
-Que pasa?- me miro confundido.
-Creo que le gustaste un poco- dije
Acepto que me molestaba pero no podía hacerle una escena de celos.
Khea la observó y me miro a mi.
-No es mi tipo- Dijo simplemente.
-Ah si? Y como es tu tipo?- Dije cruzando mis brazos.
-Como tu- Dijo
No esperaba eso, sinceramente no lo esperaba, agache mi cabeza y mis mejillas se pusieron calientes.
La moza trajo nuestra comida y cuando se fue le guiño el ojo a Khea.
-Jajajaj bueno, está fácil la cosa por acá- Dije.
Rápidamente comencé a comer mi Donna, no podía creer lo que acaba de decir.
La moza se giró y me miro mal.
Khea comenzó a reírse a carcajadas.
-Esta fácil la cosa por acá- Dijo en modo de burla.
Me hundí en mi asiento y tapé mi rostro riéndome.
-Basta- le pegue suave en su brazo.
-esta bien esta bien- Dijo levantando sus manos.
Tome de mi jugo y lo mire con odio.
-y esas bolsas de que son?- pregunto mirándolas.
-Es ropa para la fiesta- contesté
-Te quedas a dormir?- Dijo
-Sip
-genial- Dijo guiñeandome un ojo.
Le saque una foto a mi comida para Snapchat y Khea me miro.
Saco su teléfono y dijo - A ver una foto.
Me resisti pero me convenció

-Saliste hermosa- Dijo mientras me mostraba la foto

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-Saliste hermosa- Dijo mientras me mostraba la foto.
Negué con la cabeza y sonreí.
Terminamos de comer y fuimos a un parque, nos sentamos en un banco.

-Cameron jamás volvió a molestarte?- pregunto.
Los recuerdos comenzaron a atormentarme, me quede en silencio.
-Perdon, perdón, no debí preguntar eso ahora- Dijo rascando su cuello.
-No- susurre.
-que?- pregunto.
-No volví a saber de él- Dije más fuerte.
-Mejor así- Dijo.
Paso un brazo por atrás mío y me presiono contra él.
-Yo voy a protegerte- Dijo.
-Gracias Khea- Dije.
Nos quedamos unos minutos así, abrazados.
-Vamos a caminar?- propuse.
-sip- Dijo levantándose.
Estuvimos toda la tarde caminando y hablando sobre todo, Khea era más interesante de lo que pensaba, era gentil, dulce y muy protector. Y muy hermoso obvio.
Pidió llevar mis bolsas pero yo me quede con una y él con otras dos.
-Me siento toda una diva- Dijo.
Comenzó a caminar afeminado y sosteniendo las bolsas en su mano.
Comencé a reírme y grabé, cuando se percató de lo que yo hacía corrió hacia mi.
-ey qué haces- Dijo rodeándome con sus brazos y haciéndome dar una vuelta.
Dejo de dar la vuelta y quedamos frente a frente, a solo centímetros.
Me acorde de cuando estábamos en mi departamento, a solo centímetros.
Khea se acercó, pero algo golpeó mi pierna y mi reacción fue mirar que era.
MIERDA PORQUE ALGO SIEMPRE TIENE QUE ARRUINAR EL MOMENTO.
una niña asustada se acercó.
-Perdon, estaba jugando, no quise golpearte.- La Niña rubia de grandes ojos café me miraba arrepentida.
Me agache y le dije - No pasa nada linda, no te preocupes.
Me dio una sonrisa y se alejó corriendo.
Khea me sonrió y seguimos caminando.
Caminamos por toda la ciudad hablando y hablando, hasta que se hizo de noche y se escuchaban truenos.
-Mierda- solté.
Comenzó a llover fuerte y corrimos, parábamos en algunos techitos y nos decíamos "ahora" y comenzábamos a correr de nuevo.
Llegamos a mi apartamento y tenía que entrar.
-Gracias por todo, la pase genial.- me puse bajo el techo.
Khea se quedo bajo la lluvia y me sonrió.
Es ahora o nunca, dijo esa voz.
Corrí hacia el, lo rodie con mis brazos y nos besamos.
Puso sus manos en mi espalda, sus labios seguían mi movimiento, lento, me encantaba.
Sus labios eran la cosa más adictiva del mundo, nuestras lenguas bailaban felices entre sí, sus manos acariciaban mi espalda.
Nos separamos y nos miramos, reímos y nos dejamos de abrazar.
-Gracias nuevamente Khea- Dije.
-Gracias a vos preciosa- me guiño un ojo y se fue.
Entre a la casa, congelada, me fui a pegar una ducha y cuando salí me hice un café.
Tomaba tranquila el café observando cómo las gotas caían de mi ventana, sonriendo por los recuerdos.
Escucho que una puerta se abre y observo el pasillo.
Duki entra caminando con un cuaderno en sus manos, leyendo, muy concentrado.
-Que haces?- pregunte.
-Estudiando- Dijo sin mirarme.
Me asomé a ver que estudiaba y era historia
-Si necesitas algo avísame- Dije mientras me iba a la habitación.
-Que te cuides- Dijo

- De?- Me di la vuelta.

-De todo, se que saliste con Khea hoy, solamente quiero que te cuides, si?- dijo.

No pude evitar correr y y abrazarlo.

-suficiente amor- dijo

me reí y me fui a mi habitación, deje el cafe en la mesita de luz y mire una pelicula en Netflix, cuando termino escuche mi teléfono sonar.

me reí y me fui a mi habitación, deje el cafe en la mesita de luz y mire una pelicula en Netflix, cuando termino escuche mi teléfono sonar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Espere a que me llamara y el teléfono sonó, los nervios me abundaron.
-ho-hola- Dije
-Y que andas haciendo?-su voz a través del teléfono me volvió loca.
-Nada antes estaba mirando una película y vos?- pregunte.
-Nada...... sigo un poco húmedo por la lluvia- Dijo.
Sentí mis mejillas calientes recordando el beso.
-Te pasa por bobo- Dije mientras me acostaba en la cama y reía.
-Me pasa por quedarme besándome con vos- Dijo riéndose también.
-Yo no lo pedí que lo hagas- Dije haciéndome la enojada.
-Yo se que querías- dijo
si obvio.
Solamente me reí.
-Viste, tengo razón- dijo riendo.
-Bastaaaa- dije
-Tu hermano te dijo algo?
-Noo- mentí
-Mañana seguro me mata- dijo
-No sabe que me diste un beso- dije.
-Creo que sobreviviré un poco más- dijo en chiste.
Ambos reímos.
Hablamos muchísimo, En un momento Khea se cayó y estuvo 20 minutos tirado en el suelo riendo como estupido.
-Son las 1:30 ya- dije.
-Uhhh re tarde vo- dijo sorprendido
-Buenas noches Khea.- dije
-Buenas noches Isa- contestó.
Corte la llamada y apreté el teléfono contra mi pecho sonriendo.
Mierda, lo adoro.

Solo amigos/Khea Donde viven las historias. Descúbrelo ahora