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Miré mi reloj. 

Creo que esta es la primera vez que no llego tarde. Dianna se alegrará.  Cerré el coche y, al darme la vuelta... ¡vi a un dios! ¿De dónde ha salido este hombre? Espera que sea uno de nuestros nuevos clientes... ¡y espero poder trabajar con él! 

Reduje la velocidad para asegurarme de llegar a la puerta de edificio al mismo tiempo que él. 

El hombre llevaba un traje hecho a medida. Era muy elegante y parecía bastante caro. Supuse que sería alguien muy exitoso. Como había planeado, los dos llegamos a la puerta al mismo tiempo. ¡Estaba junto a él! 

Hola. - Dije simplemente. 

De cerca me di cuenta de que el hombre era muy alto y musculoso. Al reparar en mi presencia, me miró de pies a cabeza.

Hola. - Me devolvió el saludo. Los dos nos quedamos de pie junto a la puerta sin movernos. Era una situación incómoda.

Entonces... estás... aquí.  - dije tratando de no parecer nerviosa.

Evidentemente. - me contestó con una voz y una mirada bastante seria. 

¿Has venido a ver a alguien de Hamilton y asociados? - Tuve el valor de preguntarle.  - Trabajo ahí. 

Sí, es lo que intento... pero estás bloqueando la puerta. - dijo aun con la voz seria.

Me moví y el hombre abrió la puerta, entró y luego la cerró de un portazo.

¡Qué imbécil! -pensé y caminé por el pasillo hacia mi oficina. 

Junto a los lavabos, había un hombre. Parecía perdido. 

¡Qué hombre tan guapo! Dos hombres guapísimos en la misma mañana... ¡Este es mi día de suerte! Debe ser una señal del cielo. - Pensé.

Al acercarme, me di cuenta de que conocía a ese hombre. - Me quedé observándolo un momento para salir de la duda.

¿No es...? ¿No es... Tyler Archer? Tyler Archer, sí... el famoso actor... el galán que desapareció del ojo público hace dos años... - dije sorprendida. 

¡Sí, lo es! - grité para mis adentros. Es mucho más guapo en persona que en la televisión...

¿Puedo ayudarte? - me atreví a preguntarle.

Oh, estoy buscando la oficina de Dianna Hamilton. ¿La conoces? - Me preguntó con una agradable sonrisa.

¡Claro! Es mi jefa. - le dije devolviendo la sonrisa. - Te llevaré a su oficina. Ven.

Muchas gracias. - Me volvió a hablar con aquella bonita sonrisa.

Caminamos durante unos minutos. En el camino, junté el suficiente coraje para preguntarle si de verdad era quién yo pensaba que era.

¿Eres... ese actor famoso? - le pregunté con algo de nerviosismo.

Lo era, más bien. Ahora no lo soy. - Contestó de forma agradable.

Hanna, mi mejor amiga, te adora. - le dije.

Es bueno saberlo. - dijo, volviendo a tener esa sonrisa.

Ha visto todas tus películas. Incluso te ha ido a ver al teatro varias veces. - le seguí contando. - Cuando anunciaste tu retiro, se pasó una semana entera llorando.

Por favor, dile que lamento haberle causado tanta angustia. - Me dijo mirándome a los ojos.

Esta es la oficina de Dianna. - Anuncié. 

Gracias por tu ayuda. - me agradeció nuevamente con su sonrisa en su rostro. - ¿Me recuerdas tu nombre? - Me pregunto.

Sophie - dije. 

My Fake MarriageWhere stories live. Discover now