christmas. [hyuninmin]

2.

Desde ese día los chicos notaban a JeongIn decaído, por ello querían hacer algo la noche de navidad. El problema es que faltan horas para dicha celebración y aún no decidieron que iban a regalarle.

Mientras caminaban se preguntaron qué lugar podría estar abierto aún hasta que divisaron a lo lejos una juguetería. Entraron sin dudarlo.

—Estamos por cerrar. ¿Qué necesitan?— Habló un hombre de cabello castaño y gran sonrisa.

—Bueno… nosotros queremos un regalo para un chico que está deprimido...— Habló Seungmin sintiéndose intimidado por la mirada del hombre.

—Ese chico es nuestro novio y queríamos animarlo— Esta vez habló Hyunjin sin pelos en la lengua.

—¿Por qué está triste?— Preguntó otro hombre con uniforme que, al parecer había estado escuchando la conversación y no acomodando los artículos.

—Básicamente odia las navidades.

—Me recuerda al pequeño Chan. Dijo el hombre mostrando su gran sonrisa al encargado de organizar.

—¡Cállate!. Exclamó el mencionado tirándole un oso de peluche haciendo que los chicos rieran ante tal acción.

—Descartemos los osos navideños entonces— Hizo una pausa —Tengo una idea vengan. Llamó a los chicos haciendo un ademán con su mano.

Los adolescentes asintieron y, en consecuente lo siguieron.

El hombre los llevó por un pasillo bastante colorido donde al parecer no estaba permitida la entrada al público, por lo que Hyunjin y Seungmin se asustaron un poco, hasta que vieron que era una especie de fábrica de osos de peluche.

—Normalmente la gente hace estas por encargo, pero como me recordaron a mí en mis años de secundaria, los ayudaré— Sonrió —Mi idea consistía en que cada uno cree un oso y se lo entregue.

—¿Por dónde comenzamos?. Interrogaron al unísono mientras sonreían.

Vaya que lo deben querer a ese niño.

El hombre procedió a explicar cómo debían hacerlo y si no querían hacerlo desde cero tenían que elegir de los osos del canasto, por obvias razones Hyunjin optó por la segunda, mientras Seungmin había tomado un par de tijeras para comenzar a cortar la tela de tonalidad miel.

El segundo paso era grabar algún audio o  poner uno predeterminado. Ambos fueron con el dispositivo lejos para poder hacerlo. Cuándo volvieron el hombre se dedicó a colocar el circuito de tal manera que el juguete funcionara con pilas doble A.

El último paso era elegir la ropa para cada peluche, los chicos los vistieron con ropas elegantes ya que la navidad es una época en donde hasta la gente más pobre se arregla con lo mejor que tiene.

Al finalizar los adolescentes pagaron el dinero correspondiente y les agradecieron a los hombres por dejarlos estar en su tienda cuándo iban a cerrar.

El hombre sonriente les deseo suerte y ellos salieron de la tienda. Vieron la hora, faltaban treinta minutos para Navidad, ninguno podía creer cuánto tiempo habían estado ahí por lo que Hyunjin tuvo que llamar a Jinyoung, su hermano mayor, para que los llevara al destino.