Capítulo 8

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Despues de aquel desafortunado momento, la rubia vio que su enamorada necesitaba estabilidad, estaban acabando sus carreras y ya era tiempo de continuar con su vida personal. Kara y Lena eran almas gemelas, se comprendían en todo, eran excelentes amigas y amantes, hasta que un día Kara decidió que era el momento adecuado de pasar a otro nivel, quería que Lena fuera su esposa

-Me estoy muriendo de los nervios- decía la rubia mientras veía a sus padres junto a ella en la puerta de la casa de los Luthor

-tranquila cariño, ustedes se quieren bien y yo al menos espero que no pase mucho tiempo, ya quiero lindos niños correteando por casa, jajajaja- decía la imponente pero tierna Alura Zor-el

Tocaron el timbre y salió Lilian Luthor, quien los recibió en la sala de los Oscars que tenían en casa.

Tomen asiento por favor, Lena esta por bajar, y tranquila Kara, ella dirá que si- dijo la mujer tomando la mano de la rubia

Gracias Lilian, muchas gracias- decía la rubia mientras veía como por la escalera de espiral bajaba la mujer de su vida

Lena iba con un vestido lila ceñido a su cintura, unas sandalias negras de pequeño tacón y un maquillaje muy suave que le daba un aspecto tremendamente espectacular, se acercó a Kara y le dejo un beso en los labios antes saludar a los señores Zor-el.

La cena empezó con tranquilidad y así siguieron hasta que llegó el momento esperado, Kara se puso en pie y le tendió la mano a la morena para que la siguiera hasta el centro del salón, sus padres estaban al tanto de todo y ayudaron con la idea

Len, sé que llevamos un tiempo juntas, pero te has convertido en la luz y alegría de mi vida, no puedo pensar en el futuro si tu no estas y quería volver a nuestra ciudad porque aquí fue donde todo comenzó, aquí fuimos felices y lo seguiremos siendo, junto a nuestros padres que nos aman y quiero preguntarte – saco una cajita de terciopelo negro de su fino traje de tres piezas- amor, me concederías el privilegio de llamarte mi esposa por el resto de nuestros días?

Lena se llevó una mano cubriéndose la boca mientras echo a correr escaleras arriba, nadie sabía que pensar ni que decir, no era la reacción que esperaron…

Mientras una Lena llegaba a su habitación y cogió su celular para marcar al tan familiar número del hombre con quien estaba compartiendo su amor, nada más y nada menos que el ex de su escuela James Olsen, con quien llevaba una relación paralela a la de Kara. Le conto todo lo sucedido y él le dijo que sabía que era un pasatiempo para ella y que no la hiciera esperar más, que le dijera que sí.

Lena más calmada volvió a la sala y ante la atenta mirada de todos se acercó a Kara- perdóname amor, me tomaste por completa sorpresa, estas lagrimas son de felicidad, y si, acepto ser tu esposa- dicho esto le sello la boca con un apasionado beso fingiendo ante todos su “amor” por la rubia. Todos ya más calmados brindaron por el reciente compromiso augurando los buenos deseos a la pareja.

Para nadie era secreto de que la rubia era intersexual, pues poseía un miembro y quizá ese detalle hizo que Lena la tomara más en serio, así que esa noche ambas tuvieron su celebración particular en medio de muchos besos y caricias que buscaban más allá.

Pero en la intimidad no todo era color de rosa, Lena nunca quiso que hubieran juegos previos, solo se limitaba a consumar el acto y luego girarse al otro lado de la cama a dormir, mientras Kara le acariciaba distraídamente la espalda y le susurraba muchos te quiero hasta quedarse dormida, aquella noche tampoco fue la excepción, salvo el comentario de la rubia de querer tener hijos con ella, por lo demás todo era igual.

Desde pequeñaWhere stories live. Discover now