El Último Beso

Cap XIX

—¿Que es lo que me quieres decir?— pregunto el pelirrojo intrigado

—Mañana iré a hablar con Todoroki y me gustaría que me acompañaras— miro al contrario con detenimiento esperando la respuesta

—¿Yo? — lo pensó por un momento —Esta bien, sólo me dices a que hora—

—Gracias— sonrió —Es probable que en la mañana... Bueno vayamos a comer—

—De acuerdo... — salió de la habitación y fue hacia el comedor

—¿Ya?— pregunto la chica un tanto molesta mientras ponía unos platos sobre la mesa

—Ya— respondió el pelirrojo tomando asiento

—Lo siento Momo, pero no quiero que te alteres— se disculpó el rubio sentándose a un lado del pelirrojo

—Si, no hay problema— contestó cortante sentándose y comenzando a comer, el rubio y el pelirrojo hicieron la misma acción, terminaron su comida y cada quien lavó su plato, se dieron las buenas noches y todos de fueron a dormir

En el castillo...

—Deku— entró el de cabello bicolor viendo el desastre que había hecho el peliverde —¿Que fue lo que hiciste? — subió su tono de voz, pero el contrario no respondió ya que se encontraba dormido, se acercó y lo miro profundamente dormido, sonrió y rodeó la cama acostándose a un lado del peliverde se aproximó y beso con sigilo los labios de éste cuidando no despertarlo bajó poco a poco el escote de la camisa dejando al descubierto su cuello y hombro se acercó y comenzó a repartit besos por toda la área

—Mgh... K-kacchan, dejame dormir... — comentó entre sueños el peliverde cubriéndose el hombro

El contrario fruncio el ceño y se dio vuelta incorporándose y despojandose de su ropa para luego volver a acostarse dándole la espalda al peliverde, se cubrió con la sabana y decidió dormir

Al día siguiente...

El peliverde abrió poco a poco los ojos y sintió un ligero peso sobre su cintura un tanto desconcertado giro su cabeza viendo al de cabello bicolor durmiendo placenteramente mientras lo abrazaba, éste inmediatamente hizo un gesto de disgusto y salió de la cama exaltado —¿Por que estas en la misma cama que yo?— pregunto alterado alzando la voz despertando al contrario

—Es mi habitación... — se incorporó tallando sus ojos —¿Pretendias que durmiera en otra cama?—

—Te dije que me provocaba asco el hecho de que me tocaras... — el contrario se levantó y se dirigió al peliverde sujetandolo con fuerza del brazo —¡Sueltame!—

—Te voy a decir una cosa Deku— lo miro amenazante —Me estas colmando la paciencia y con esta actitud tuya, aquel anillo que tanto anhelas terminara botado en algún lado, así que o mejoras este comportamiento o pierdes el anillo, ¿quedo claro?— soltó el brazo del peliverde

—De... De acuerdo— respondió indignado sujetando su brazo

—Bien... — fue a cepillarse los dientes y a tomar una ducha mientras el peliverde comía algo y llamaba a un sirviente para que limpiara el desastre que había en la habitación

—Buenos días, joven Izuku— entró un sirviente con una sonrisa

—B-buenos días... — observó como entraba y comenzaba a limpiar

—¿Como durmió?— comenzó a sacar plática

—B-bien, gracias— sonrió nervioso para luego dirigirse hacia la ventana y mirar el paisaje