Prólogo

500 26 3
                                    

Alice suspiro mientras observaba a su sobrina, la niña estaba jugando con Emmett y el grandote estaba haciendo lo más suave qué podía, Edward y Bella estaban en su casa en el bosque, Jasper había ido a cazar y Rosalie aún no salía de la universidad por lo tanto sólo ellos estaban con la menor.

-¡Cuidado Emmett!- Dijo Alice al ver qué estaban luchando.

-Tengo todo bajo control, Ali.- Comentó con una sonrisa antes de qué fuera tacleado por Nessie, trató de no reírse ante la reacción de su hermano al ver lo qué ella había hecho.

Sabía qué Emmett estaba conteniendo su fuerza, por lo tanto no corría riesgo de qué se alejará para ir a buscar a su marido al bosque, no se demoraría mucho, especialmente si Jazzy sabe qué la dejó a solas con Emmett.

Emmett vio cómo su hermanita se fue hacia el bosque y dio por finalizado el juego qué tenía con ella, para pasar a su otra actividad favorita con su sobrina y eso era la X-Box.

-Te voy a ganar esta vez- Dijo Nessie cómo si supiera lo qué estaba pensando.

-Ya veremos quién le gana a quién- Ella se subió a espaldas de su tío y ambos entraron a la casa para qué su competencia empiece.

Alice estaba caminando por el bosque, ya sabía dónde estaba su esposo, pero le gustaba tomarse su tiempo para llegar, además sabía qué lo más probable aún estaría cazando.

Estaba a punto de llegar cuando una visión la golpeó, haciendo qué se detuviera por completo.

-Visión de Alice-

Estaba caminando hacia una casa un poco abandonada, entró sin tocar y allí se encontraban dos niñas, ambas se levantaron y fueron a abrazarla fuertemente.

-Las extrañe mucho mis niñas- Hablo Alice.

-Nosotras también- Comentó la muchacha rubia. -No queremos estar separadas de ti nunca más.-

-No lo harán, ya he tomado mi decisión- Beso la cabeza de ambas mientras las abrazaba.

-Fin de la visión.-

Cuando su visión había terminado, lo primero qué vio fue a su esposo, se veía qué estaba preocupado.

-¿Qué ocurre, Ali?- Le preguntó mientras agarraba su mano.

-Nada-

Ella sabía perfectamente qué era una estupidez decirle aquella mentira,  y no era sólo por el poder qué tenía, si no porqué se conocian tanto qué uno podía decir si el otro estaba ocultando algo cómo ahora,pero no estaba dispuesta a decirle lo qué había visto o por lo menos no aún.

Jasper frunció el ceño ante aquello, pero no la iba a presionar, cuando este lista ella le diría lo qué había visto, una ola de culpabilidad invadió a el rubio y supo qué era de ella.

-No te preocupes, cariño. Dime cuándo te sientas lista.- Beso la frente de su esposa haciendo qué ella se sintiera un poco mejor.

-Gracias- Susurró ella antes de qué volvieran a su casa de la mano, esperando qué ni Emmett, ni Nessie hayan roto algo en la ausencia de ambos.

A/N: ¿Qué les parece? He reeditado esta historia, espero qué les guste y me dejen su opinión.

Las hijas de Alice Cullen Donde viven las historias. Descúbrelo ahora