Único

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Lo iba a subir mañana pero no pude por culpa de Wattpad, el no quería. Traté hoy en la mañana y tarde y tampoco, hasta ahora lo logré.

Disfruten.


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Suspiró al no encontrar ningún programa que lo entretuviera, los días de vacaciones se habían convertido en unos sumamente aburridos. No hacía nada en todo el día, y no hablemos de su marido que era un absorto al trabajo. Quería divertirse, quería algo de adrenalina a su vida. Trató de contactarse con sus amigos, pero ninguno le contestaba, estaban ocupados con sus familias mientras que se ahogaba en esas cuatro paredes. Por un momento pensó en tener hijos... pero Jimin prefería su soledad a tener que acudir a eso.

Estaba vestido con la bata de dormir de su esposo, era roja, la había comprado porque decía que el rojo y todas sus tonalidades representaba su pasión. Ojalá un símbolo hiciera más que reflejar bobería como esa.

Como estaba desnudo decidió meter su mano por de bajo de su bata y reposar su mano en su pene, no se iba a masturbar, era el aburrimiento que apagaba hasta ese placer mismo. Siguió pasando los minutos, agregando que también pasaba los canales como un imbécil. Para cuando fueron las siete de la noche y su esposo no llegaba, abrió las ventanas para darle paso al frío viento de la noche de hoy, su celular vibró en su mesa de noche anunciando que su fatídico esposo lo llamaba.

Contestó.

Cielo —la voz de aquel reflejaba cansancio.

—Dime, cariño —dejó su celular contraído entre su oreja, mejilla y hombro, para así jugar con las tiras de la bata de su marido.

Voy a llegar tarde, no me esperes despierto.

—No lo pensaba hacer, pero gracias por el aviso —encontró un chicle en el bolsillo de su vestimenta y lo llevó a su boca.

Okey... —un momento de silencio donde Jimin no pudo evitar rodar los ojos— ¿no me vas a preguntar por qué no llego temprano?

No quiero molestarte para que pienses que desconfío de ti.

Es un gran punto pero me gusta que te preocupes —Jimin chasqueó su lengua con fastidio.

—De acuerdo —colocó algo se música.

Mm, ¿eso es salsa latina?

—Sí.

Al parecer estarás ocupado. Me voy, te amo, suerte con Joe Arroyo.

De acuerdo. Besos.

Al colgar suspiró irritado botando su celular a la cama, la música seguía su ritmo con sus grandes vibraciones, las trompetas quemaban las paredes y hacían temblar los espejos, las caderas de Jimin se contagiaban de la voz del cantante junto a los tambores. La armonía se incrustaba en la columna de Jimin, sus oídos exigían más volumen y sus piernas no se quedaron atrás, y fue así que la orquesta fue acompañada por un precioso cuerpo. No era bueno bailando salsa, sin embargo era capaz de seguir el ritmo como un profesional.

De repente, las cortinas del vecino de al frente relucieron una sombra masculina muy inquieto por el alto volumen de la música, no le molestaba pero se Le hacía muy extraño. Jimin siguió bailando viendo por detrás de su hombro aquella sombra conocida, con sus manos tomó de las mangas de la bata y subió los brazos, reposando sus manos en su cabeza. La imagen era sensual y picante. El enorme trasero fue medio expuesto para aquel visitante, dando a la vista una braga negra de encaje, la bata rozaba suavemente su piel mientras que sus mangas seguían aferrada a las manos de Jimin.

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⏰ Last updated: Sep 15, 2021 ⏰

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Él te hace dormida, y tú aquí en mi camaWhere stories live. Discover now