Viajando al pasado [Harry Potter] ✔

FRANK NEVILLE LONGBOTTOM

Cuando los del futuro llegaron al Gran Comedor se sentaron es sus respectivos lugares excepto un encapuchado que se dirigió al tarima.

Cuando la capucha fue retirada dejó ver a una copia de su abuelo. El chico era castaño y ojos azules y se le notaba nervioso ya que no paraba de mover las manos y tenía un leve sonrojo.

-Frank, has vuelto a nacer...-comentaron los Merodeadores a su compañero de cuarto.

-Hola, me llamo Frank Neville Longbottom Abbott y mis padres son Neville Longbottom y Hannah Abbott y mi nombre me lo pusieron en nombre a mí abuelo. Tengo 18 años. Fui un Griffindor –la casa aplaudió-, fui prefecto y premio anual –sus padres lo miraron con orgullo-. Y por ultimo... ¡Soy parte de los Merodeadores 2.0! –exclamó Frank orgulloso.

-¡NOOOOOO! –exclamaron la profesora McGonagall y Alice McLean.

-¡SIIIIIIIII! –exclamaron los Merodeadores a la vez que las anteriores.

-¿Y qué Merodeador eres? –pregunto Remus.

-Colagusano, quería limpiar su nombre, pero veo que no hacía falta –dijo con una sonrisa.

-Lo siento –se volvió a disculpar Peter.

-Ya te hemos dicho que está todo bien, Colagusano –le dijo a su amigo James.

-También soy un animago, me convierto en un bulldog pero igualmente me puese el nombre de Colagusano –comentó Frank sorprendiendo a todos al decir que era animago con tan corta edad-. ¿Alguna pregunta?

-¿Tienes novia? –preguntó coquetamente un chica de Griffindor.

-Si la tengo, y es ese bellezón de allí –dijo señalando a Dominique quien miraba a la chica con una mirada de basilisco-. Voy a dejar mi recuerdo para que lo veais.

A continuación hizo los mismos movimientos de varita que hacían los chicos para poner el recuerdo y se fue a saludar a sus abuelos en forma de bulldog.

RECUERDO

En el castillo de Hogwarts, junto al baño de los profesores había un grupito de 4 chicos de 11 años hablando en susurros. Tres de esos chicos tenían el rostro borroso.

-Colagusano, ¿tienes la llave? –pregunto uno de los chicos.

-Si –contestó Frank sacando las llaves del bolsillo de su túnica-. Las he cogido del despacho de Flich, mi padre las tiene bien escondidas y Filch ya es viejo.

-Concuerdo contigo –dijo asintiendo el muchacho para luego girarse para ver a otro muchacho borroso-. Y tú, Canuto, ¿has traído las bombas fétidas y las de moco de trol?

El muchacho asintió sacándolos de sus bolsillos.

-Yo he traído esta bomba rosa, la compré en la tienda de George. Expulsa un polvo rosa que tarda 5 días en desaparecer –dijo el último chico de cara borrosa.

-Muy bien, Lunático –dijeron todos chocando los 5 a su amigo que sonrió con arrogancia.

(Después de preparar la broma)

Los 4 chicos salieron de los baños riendo a carcajadas y se fueron a esconder detrás de una columna para ver cuál de los profesores entra y es víctima de su broma.

-Yo apuesto que será la profesora de adivinación –comentó uno de ellos.

-Yo que es el profesor Víctor –comentó otro.

-Pues yo dijo el profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras.

-Pues va a ser la directora McGonagall la que entre –comentó con horror Frank mirando por detrás de sus amigos que es donde se encontraba la puerta del baño.

Cuando sus amigos se dieron la vuelta solo vieron la puerta del baño cerrándose.

-No me jodas que ha entrado la directora –dijo uno de los muchachos girándose para mirar a Frank.

-Te jodo, Cornamenta... Te jodo –dijo con la mirada fija en la puerta por donde su directora había pasado.

Segundos después se escucho un ¡BUM! Y un humo rosa salió por debajo de la puerta.

(En el despacho de la directora con sus respectivos padres)

-¡¿PERO COMO SE OS OCURRIÓ TAL BARBARIDAD?! –pregunto en un grito Ginny a los cuatro chicos.

-¡¿Y COMO SE TE OCURRE A TI, GEORGE, VENDERLE UNA BOMBA DE POLVO ROSA A MI HIJO?! –preguntó Pansy al dueño de la tienda de bromas.

-¿Y por qué no? –preguntó George con cara de cachorro regañado.

-¡¿ES QUE NO LO CONOCES?! –preguntaron todas las madres de la sala.

-¡Que sepáis que estáis más que castigados! –exclamó Angelina para luego girarse para mirar a su esposo-. ¡Y tu hoy duermes en el sofá!

Dicho esto todos fueron del despacho dejando a unos niños asustados y a una mujer pintada de rosa furiosa.

FIN DEL RECUERDO

-Y así, señoras y señores, fue nuestra primera broma en Hogwarts. Y también nuestro primer castigo –comentó un encapuchado.

-Calla Fred –le dijo su madre y este calló.