Capitulo 2 "Flores"

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Thomas se dedicó un rato para lamentarse pero después de un rato se resignó dándose cuenta que lamentarse no servía de nada así que salió.

Lamentablemente, el simple hecho de interactuar con Dylan empeoraba su ya mala situación, se dio cuenta en el momento en que al comenzar a hablar con este el ardor aumentó al punto que le dolía un poco respirar.

—¡Dylan O'Brien! —Llamó el director al de cabellos negros. Su salvación había llegado.

—¡Si, en un momento voy! — Respondió para luego volverse a con Thomas y dedicarle una sonrisa —Nos vemos luego Thomas

El recién nombrado asintió no queriendo hablar, ya que pensaba que al hacer esto comenzarían a salir los malditos pétalos y el sería descubierto.
Una vez se fue el rubio susurró un "adiós" casi al instante de eso sintió una sensación asfixiante en el pecho seguido de dolores punzantes en esta misma parte que se traslado hacia su garganta Le dieron ganas de vomitar

Comenzó a toser lo cual empeoraba las náuseas. Corrió hacia el baño con una mano en su boca, una vez llegó cerro con pestillo la puerta y acercándose al lavamanos se inclinó sobre el apartando a la vez su mano de la boca, de esta misma salieron los típicos pétalos de días anteriores pero junto a ellos pedazos de flores y flores pequeñas llenas de sangre estas, parecían que al contacto con el aire habían empezado a abrirse dejando ver que la suposición de el rubio se comprobara, dentro de el estaba creciendo un arbusto de rosas.

Tembló atemorizado, al igual que en paranoia sintió como si de la nada le empezara a faltar oxígeno, como si las plantas ya hubieran empezado a marchitarse y comenzado a asfixiarlo lentamente también pensó en las espinas naturales de las rosas, si esto no llegaba a si etapa final, las espinas lo matarían.

Sabia perfectamente que si quería evitar la cirugía debía decírselo, debia decirle a Dylan lo que sentía aun si lo rechazaba, no podía quedarse sin intentarlo

—Si no le digo moriré... —Cerró los ojos con fuerza, estaba decidido a hacerlo puede que justo en ese momento no lo haría pero si que lo haría después.

Deseó con todas sus fuerzas que esto fuera una simple pesadilla... Pero no despertó, esto era la realidad y el tenia La enfermedad de las flores, Hanahaki

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Después de grabar la escena con el O'Brien, el director lo dejó libre este de inmediato se dirigió a tomar un respiro y ya sea para su mala o para buena suerte el Sangster se encontraba ahí a donde se dirigía.

El no tenia el común caracter que tenía normalmente, tenia en su lugar la mirada perdida y se le notaba distante, pensativo. Eso al azabache le preocupó

Fuera de la farsa de que únicamente sentía por Thomas una gran amistad y un gran aprecio, el se encontraba total y perdidamente enamorado del otro pero no se lo decia por miedo al rechazo y que al ser rechazado pudiera perder su amistad que mantenía con el. No se daba cuenta de que esto solo hería en gran manera al rubio.

Por esto también vivía con miedo de que la enfermedad ya mencionada anteriormente le atacara, se le hacia extraño que aun no lo hiciera sinceramente.

Suspiró, decidido se dirigió a donde el otro e intentó de muchas maneras diferentes hacerlo reír aunque la mayoría de sus intentos fueron en vano, al cabo de unos minutos lo logró al atorarse con una silla (no pregunten como pasó) y con eso caer al suelo aunque en realidad el se rió por el extraño baile que hacia Dylan para librarse de la silla.

Continuaron hablando un rato de cualquier cosa, parecía que todo iba bien hasta que la paz fue abruptamente interrumpida por una fuerte tos por parte de Thomas, antes de que su acompañante pudiera preguntar si estaba bien pétalos y pequeñas rosas cayeron desde la boca del contrario.
Lo miró sorprendido y a la vez preocupado. ¿como no se dio cuenta?

—Thomas tu... —El británico lo miró con temor y antes de que el pelinegro pudiera siquiera terminar la frase emprendió la huída.

Observo los pétalos sangrientos que ahora lucían en el suelo en algunos pequeños charcos color carmín pensando en el que acababa de irse

¿Por cuanto tiempo lo tuvo y el no se dio cuenta?, ¿por cuanto estuvo sufriendo en silencio?

—Mierda... —Susurró y sin llegar a pensarlo dos veces corrió a donde el de ojos cafés había ido anteriormente. Esperaba que no fuera muy tarde.

"Estoy tosiendo flores, esto no debería pasar, esto no debería ser normal. Hanahaki, hanahaki apareciendo debido al amor que no podré tener... "

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Hanahaki Disease [Dylmas]Where stories live. Discover now