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I. CHO CHANG

La chica rubia se sentó silenciosamente en la esquina del vagón con un libro en mano y la mente llena de pensamientos enfadados

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La chica rubia se sentó silenciosamente en la esquina del vagón con un libro en mano y la mente llena de pensamientos enfadados. Pensamientos sobre las personas irritantes sentándose en frente de ella, sobre cerdos no cultivados con los que iba a tener que lidiar todo el año, y sobre tener que atender en la escuela. Deseaba que Harry Potter no se tuviera que sentar con Ginny y Neville solo porque él no tuviera otros amigos que no fueran prefectos. Y después estaba Luna, la caprichosa de Ravenclaw un año por debajo de Clara. Luna era extraña, pero Clara no la odiaba, así que serían amigas a su debido tiempo.

Clara pensaba que finalizaría su libro en paz, hasta que escuchó un grito y sintió algo mojado al lado de su cara. El querido cactus de Neville, Mimbulus mimbletonia se había reventado de alguna manera y había esparcido una sustancia espesa y verde en todo el vagón. La chica rubia cerró su libro y se limpió la sustancia de su cara con su túnica.

—L... Lo siento —jadeó.—No había intentado esto antes... No me di cuenta de que sería tan... No te preocupes, Stinksap no es venenoso —añadió nervioso, a la vez que Harry escupió al suelo. Clara se estremeció del disgusto e incluso más cuando la puerta del vagón se abrió.

Era Cho Chang, vestida con el uniforme de Ravenclaw, excepto las túnicas, su pelo oscuro le llegaba a la cintura y sus mejillas estaban enrojecidas al ver a Harry. Clara rodó sus ojos y le dio a Ginny una mirada, después fingió una arcada y la pelirroja puso su mano en su boca ocultando su risa.

—Oh, hola Harry —Cho sonrió tímidamente.—Um... ¿Mal momento?

—Claramente —murmuró Clara.

—Oh, hola —dijo Harry limpiando sus gafas.

—Um... Bueno. Solo pensé en decir hola —Cho se encogió de hombros.—Adiós entonces —la chica ruborizada cerró la puerta del vagón y se fue con sus amigas.

—Qué perra —escupió Clara. Harry le lanzó una mirada extraña y Ginny se encogió de hombros con neutralidad. La chica miró la sustancia y suspiró.—Oh si, este desastre. ¡Scourgify! —dijo agitando su varita, todo el líquido de Stinksap desapareció.

—Lo siento —dijo Neville de nuevo.

—Está bien, Nev —dijo Ginny.—Ayudó a esconder el horrible rubor de Harry.

—Yo... Yo... Bueno... —Harry murmuró embarazosamente rascándose la parte trasera de su cabeza.

—Patético —se burló Clara.—El famoso Chico Que Vivió ni siquiera puede hablar con una engreída como Cho.

—Ella no es engreída —empezó Harry.

—Oh, lo siento, no lo es. Pero ella está bastante en forma, ¿verdad? —sonrió Clara. Sabía que era una burla y una grosería molestar a Harry y burlarse de su enamoramiento, pero no le importaba porque despreciaba a Cho y no tenía en cuenta los sentimientos de nadie.

—No discuto sobre ese punto —confesó Ginny. Neville le dio una mirada confusa y la pelirroja se encogió de hombros.—¿Qué? Ella es guapa. Pero estoy de acuerdo en que es una engreída como un Duendecillo de Cornualles.

—¿Cómo de engreído es un Duendecillo de Cornualles de todas formas? —preguntó Harry.

—Casi tanto como Cho —respondió Clara.—Ahora, por mucho que esté disfrutando esto, hice una apuesta conmigo misma para finalizar mi libro antes de que bajemos de este tren y tengo la intención de apegarme a él.

—Pero estás cerca de terminarlo —sonrió Luna.—Además, si Ron y Hermione regresan, entonces puedes evitar hablar con ellos leyendo. Es un compromiso.

Clara miró a los ojos azules pálidos de la chica y sintió una conexión instantánea. No sabía por qué no había hablado con la chica anteriormente, pero deseó haberlo hecho. Luna no tenía tacto y Clara tampoco. Por supuesto, Luna era más honesta y Clara era más grosera según algunos, pero para ella era honesta.

—Bien, dejaré mi libro y... Y hablaré contigo hasta que los otros dos lleguen —aclaró Clara guardando su libro en su bolso de mano.

—¿Por qué odias tanto a todo el mundo? —preguntó Harry extremadamente casual.

—¿Por qué no lo haces tú? —respondió la chica.—Simplemente no me gustan, diferentes razones para personas diferentes. Por ejemplo, no me gustas por ser famoso y jugar a ser el héroe todo el rato.

—¿No te gusto? —preguntó Harry algo herido.

—Sabes qué, puedo leer otro libro si acabo este —Clara se encogió de hombros sacando el libro de su bolso, dejando a los otros cuatro en el vagón otra hora más callados cuando los dos prefectos de Gryffindor regresaron para quedarse con sus amigos.

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De acuerdo, Clara es realmente una perra, bienvenidos a esta historia!

Ron y Hermione aparecerán en el próximo capítulo, así que eso es divertido y esas cosas.

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⏰ Última actualización: Dec 23, 2018 ⏰

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DOUBT [RONALD WEASLEY | 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora