Capitulo 1

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Soy conservadora de armas y reliquias, últimamente me encuentro dando mantenimiento a la armeria del museo Grimarth en Escocia su colección es bastante larga desde objetos punsocortantes fabricados con hueso y piedra encontrados en las drunas y cuevas hasta rifles de la segunda guerra mundial.

- ¡Elizabeth! el director te busca. Espencer es otro de los restauradores pero su campo es la pintura, asiento hacia el y dejo la daga que me encontraba limpiando.

- ¿tienes idea de para que me quiere?. Pregunte con incertidumbre.

- no pero es algo grande, nos pidió a Tach, a ti y a mi.

- por que nesecitaria al esperto en joyas. El solo negó pero la emoción traspasaba los poros de su piel.

La oficina del director se encontraba en la parte más alejada del museo, nuestras pisadas apenas se notaban en la alfombra, del pasillo contrario salio Tach una rubia hermosa que estaba próxima a los cuarenta, su maletín con todos sus artilujios colgaba de su hombro, los tres nos quedamos frente a la oficina pero antes de que tocaramos esta se abrió, nuestro jefe un hombre de setenta años nos invito a pasar.

Su oficina pulcramente arreglada con olor a limón nos dio la bienvenida, pero lo que nos sorprendió fue las tres vitrinas dentro de ella, uno contenía una pintura de una mujer por su apariencia rondaba los treinta y parecía alguien muy importante ya que su vestifo y joyas lo de mostraban, en la otra una corona y anillo hizo que Tach soltara un suspiro pero lo mas impresionante fue la espada que se encontraba en la ultima vitrina una gleymore del siglo XII me sonreía, en su mango tenia incrustaciones de esmeraldas y jade con una inscripción.

- estos son sus nuevos juguetes chicos, quiero que luzcan preciosos por eso ustedes son los mejores. Nuestro jefe sonrió a nosotros sabiendo que tratarnos bien a sus nuevos bebés.

- ¿a quien perteneciero?. Pregunte acercandome a la pintura y viendo como el retrato se veía en muy buen estado para su edad.

- la mujer es conocida como la princesa perdida, el  hombre que me lo vendió cuenta que la corona el anillo y la espada, la encontraron junto a la mujer sin nada mas en las drunas Demonte, ahí unos caballeros la llevaron ante su lord pues creían que era alguna clase de bruja, nada más llegar con el laird este quedo hechizado por su belleza y la desposo, de ellos nacieron dos hijos y una hija, la pequeña era demasiado traviesa y entro al estudio de su padre le llamo la atención la espada y se corto, sus gritos alertaron a su madre quien llego a la habitación mirando con horror la sangre acto seguido su madre cayo muerta en el charco de sangre, la princesa Lilia decía que una figura negra salio de la sangre y se la llevo pero nadie le creyó y la consideraron loca.

- la loca Demonte. Susurro Espencer.

- si ¿sabes quien es?. Pregunto el señor willmorth.

- se algo de ella, pero continúe.

- resulta que cada cierto tiempo gente desaparecía y volvía a aparecer todas con el mismo relato, llevadas por una criatura espectral, llegaban a un mundo de criaturas fantásticas, ogros,  demonios, brujas y un mundo desolado, unos morían ahí otros lograban regresar, un sacerdote dijo que esa espada llevaba al mundo de los espirutos y debían deshacerse de ella,  asi que tomaron la decisión de deshacer la corona y la espada, ya saben supersticiones de gente ignorante, pero antes de eso su hija se suicido antes de su boda.

- ¿quien las unió de nuevo?. Pregunte intrigada.

- no lo se, tal vez solo fue una mentira para sacar mayor provecho de la venta.

- Podemos abrir las vitrinas quisiera checar el estado del arma. Le pedí con seriedad aunque en realidad me moría por tocarla.

- por supuesto, también tiene una inscripción quiero que la traduscas para ponerla en su ficha de información. Asentí mientras quitaba la llave y abría la vitrina.

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⏰ Última actualización: Jul 08, 2019 ⏰

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