Capitulo 12: Cambios radicales.

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Le había explicado a Ruth todos los problemas que tenía hasta ahora con Harry y lo muy exhausta que me había dejado intentar de borrarlos. Había perdido confianza en mi manera de enloquecer a un chico gracias a él y a que Abril no me había ayudado mucho a conquistarlo. Ruth tenía varias ideas pero no todas muy convencionales, creo que primero tiene que ver a Harry para saber del problema del que estamos hablando.

-Oh vamos Gomez algo tiene que servir, no puede ser tan difícil el chico- gruño molesta.

Iba a ser mucho más difícil conquistarlo de lo que se esperaba, aunque sabía que Ruth no se quedaría de brazos cruzados era muy inteligente y en el asunto de los chicos aun mas, puede que cuando vea a Harry se lleve una gran sorpresa no es el tipo de chico al que ella este acostumbrada pero si podemos hacer un plan que me ayude a tenerlo solo para mí.

-Es mucho más difícil de lo que crees- murmure- Además que le gusta otra chica- puse los ojos en blanco.

-Wow, eso sí que no me lo esperaba- rio con amargura- ¿Sabes cómo es esa chica?- pregunto.

-Oh claro que si- la mire a los ojos- Senos de silicona, uñas falsas. Mucho rímel y ropa extraña- pronuncie con asco e indignación.

-¿la típica puta que quieren todos los chicos?

-Está un poco más inteligente- ladee la cabeza hacia un lado. Sería muy extraño contarle nuestra pelea en el corredor, tal vez no debería decírselo hasta que le muestre como en verdad es la tal Ezzie.

-No lo entiendo- volvió a gruñir Ruth- Mañana mismo quiero al chico aquí. Necesito verlo.- mi miro seria- Y no me vengas con excusas- acuso.

Oh, créeme que cuando se trata de Harry lo que más sobran son las excusas…

-No las habrá- sonreí- ¿No vendrás conmigo a clases mañana?- pregunte.

-No lo sé, tal vez como pasante. No me digas que el chico no vendría el por su propia cuenta a la casa- Me miro severa, esperando una respuesta.

Harry era muy tímido como para venir aquí, era tímido para todo y tenía que tener una buena excusa para traerlo aquí de la manera menos extraña posible.

Recordé lo de las tutorías de química, ¡Perfecto! Él es mi tutor por lo tanto me tiene que dar mis clases a menudo, y él no lo había hecho a menudo por lo tanto lo había estado haciendo mal y yo como una buena estudiante tendría que reprochárselo y hacerle saber que estaba mal, lo que me dejaría como una chica completamente normal y perfecta para Harry.

-Si vendrá- afirme- Es mi tutor y estos días no me ha hecho tutorías así que… no le queda de otra- tome mi bolso y saque un chicle que tenía guardado en uno de los bolsillos delanteros.

-Adoro esto- dio un gritito agudo.

-¿El qué...?

-Conquistar, este chico parece un verdadero reto y tu primita mía no pareces estar afrontándolo bien así que oficialmente; soy tu nueva tutora- palidecí.

A Abril no le iba gustar para nada esto, iba a terminar muerta si ella se llegase a enterar de lo que había dicho mi prima y esa idea no me gustaba para nada. Soy muy valiosa como para ser enterrada viva.

-Oh, no, no, no- negué exaltada- Abril ya tiene ese puesto- Ruth abrió los ojos y luego me miro confundida, aunque sentía que por alguna razón eso le divertía.

-Pues no lo ha hecho bien- se burló. Fruncí el ceño- Oh vamos, si por mi fuera hasta ya estarías casada con el chico Abril es solo una niña indefensa que por tener un novio con músculos cree tener el cielo a sus pies- puso sus ojos en blanco. Mordí mi labio inferior, ¿Cómo sabia ella de su noviazgo con Liam?- Tu mama se mostró muy comunicativa cuando llegue- dijo como si hubiera leído mis pensamientos.

-No me gusta la idea de mentirle- admití seria- Ella siempre lo descubre Ruth, la conoces.

-No enterara, calma. Tengo un plan- sonrió picara.

Tal vez, por una vez no estaría mal…

-Cuenta- exigi curiosa. 

-Te hare un cambio radical. Te verás deseable, autentica y con esa personalidad que tienes: única- abrí mis ojos sorprendida.

¿Cambio? ¿Qué tengo de malo? ¡Soy perfecta para Harry así! No puedo cambiar eso sería horrible, ¡Fatal!

-No- negué con rapidez- No creo que eso sirva, ¿Qué tengo de malo ahora? Estoy bien, me visto bien y bueno mi actitud… según Abril es algo especial pero trabajamos en eso- dije tropezando con mis palabras.

-Oh vamos Selena, si quieres mantener a ese chico contigo hasta que se gradúen mínimo tienes que darle todo lo que un chico quiere. Tienes que pulirte, tu misma lo dijiste esto te está desgastando mira, lo que aremos será muy fácil solo será una cita de compras ¡Incluso podemos invitar a Abril para que dé su opinión! Compraremos lencería, zapatos y vestidos y prepararemos la mejor cita de todo los tiempos, tendrás a Harry comiendo de tu mano ¡Dios no te puedes negar a esto!- Se levantó de la cama y empezó a dar vueltas con su celular en la mano.

¿Una cita? ¿¡Con Harry!? ¿Cómo ella lograría eso en solo unos días? ¡Yo lo había intentado por semanas y no había funcionado! Exceptuando el hecho de que casi me invita al baile de pascua… ¡Eso es!

-¡Acepto!- grite. Ruth casi tira su celular- Solo tendremos que prepararme y entrenarme, yo ya sé cómo conseguir la cita- hable emocionada. Ruth sonrió victoriosa y volvió a su celular.

Esta vez todo saldría perfecto, yo personalmente me ocuparía de ello.

                                                                                 * * *

Busque a Abril con la mirada. Libre. Había llegado un poco más temprano hoy para no tener que toparme ni con Abril ni con Liam, extrañaba la compañía de mi mejor amiga pero no iba a seguir aguantando sus sermones ni sus discursos del por qué Liam era perfecto para ella. Estaba cansada de eso y ella tenía que aprender a tomarme en cuenta.

Divise a Harry leyendo algo sentado en el suelo junto a los casilleros, se mordía el labio inferior y estaba completamente concentrado en su libro. Seguía con esa extraña pero muy atractiva vestimenta que había traído el día anterior, aun me quedaba pendiente averiguar quién era causante de ese cambio pero lo haría luego.

-Hola- susurre cuando ya estaba lo suficiente cerca de él.

-H-hola- tartamudeo torpe. Me sonrió mostrando sus preciosos hoyuelos, tan besables que lo hacían ver tan deseable. Joder, había perdido mi concentración.

Selena concéntrate.

-¿Qué lees?- pregunte fingiendo curiosidad.

-Paper Towns- susurro y me mostro la portada del libro- Uno de los mej-mejores libros de John Green s-sin duda- mordió su labio nervioso.

-Háblame de el- pestañee coqueta.

Normal, recuerda actuar normal, no exageres.

-E-es de misterio- pronuncio aún más nervioso por nuestra cercanía-  No se qu-que más quieres saber- rio.

Su risa era hermosa, joder.

Selena la concentración.

-Harry…- puse mi voz algo nostálgica- ¿Qué era lo que me querías decir el otro día?- Pregunte directa. Mordí mi labio esperando su respuesta.

-A-ah eso…- respiro hondo- Selena, ¿qu-quiere sir al baile de pascua… conmigo?- me miro fijamente esperando una repuesta.

-¡Sí!- exclame emocionanda dándole un rápido pico en los labios. Corrí lo más lejos de ahí. No podía empezar a gritar y a saltar en frente de él, iba en contra del plan-, ¡Tengo una cita con Harry! ¡Tengo una cita con Harry!- gritaba mientras agitaba mis pies y manos como una porrista- ¡Siiiiii!

-¿Selena?- murmuro una voz a mis espaldas.

Voltee.

 Esto tenía que ser una jodida broma.

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