Segunda parte: Felicitas

965 17 0
                                    

CAPITULO 19

Cuando me siento frente a la psicóloga y ella me mira, me siento rara. Me siento con las dos piernas juntitas, como si me estuviera tomando una prueba de algo. Debe ser porque tiene rayos x en los ojos, es una mutante, ya me di cuenta. No me da para mentirle ni para quedarme callada, así que voy y vomito palabras sin parar.

¿Te acordás de cuando vos fuiste a una? A vos no te gustó mucho, a tu vieja sí. Pero vos preferiste no hablar, dejarla a tu mamá. Después, cuando tu mamá se fue te pusiste a llorar. Me lo dijiste así: me largué a llorar y le dije que mi mamá era una tarada. Yo no te creí. Sos incapaz de decir eso de tu mamá. Vos te reíste y después te pusiste seria.

"Cómo me conoces, vos", me dijiste. Y te abracé y te largaste a llorar otra vez y me dijiste que te sentías sola, que nadie te entendía del todo, que querían cambiarte... Yo te dije shhhhh.

A la semana siguiente te acompañé yo.

La psicóloga me dijo que el duelo no es vestirse de negro y sentarse a llorar. El duelo hay que vivirlo, me dijo.

No morirlo. 

Solo tres segundos [Paula Bombara]Onde histórias criam vida. Descubra agora