13. Tarot. [Ana]

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La adivina parecía difusa bajo la escasa iluminación y las volutas de humo perfumado. Ana rompió a sudar... aquel sitio abarrotado de telas y abalorios estaba cerrado a cal y canto.

Su interlocutora giró la última carta.

—¿La muerte? ¿Voy a morir pronto? —saltó la adolescente con impaciencia.

—No. No funciona así. Primero va esta... —La adivina tocó una de las cartas de la mesa—. Lo más inmediato que te depara el destino es el éxito. Un éxito desmedido; por lo que veo, a nivel laboral. Enhorabuena.

»Tardarás muchos años en conocer el amor... y lo encontrarás dos veces. La primera parece platónica porque se prolonga en el tiempo y se entremezcla con la segunda, que será la que te dé descendencia. Quizá ames a un compañero que no pueda corresponderte.

—¿Por qué no iba a poder?

—La experiencia me hace pensar en homosexualidad, niña. Tuya o ajena.

—Siga.

—Problemas familiares... ¡distanciamiento! Porque... harás algo importante, algo grande. Aquí es donde entra la carta de la muerte: querrás un cambio grande, un renacimiento.

—¿Por qué iba a quererlo teniendo tanto éxito como dices? —Ana torció la boca—. Pfff... Qué tontería. Es igual, cóbreme. Me voy ya.

Microverwatch. [Español]Where stories live. Discover now