Un cielo solo para ti

I

Brunno:

Me encuentro con mis primos Vicente y Alexa en el comedor, arreglando las cosas para irnos con toda la familia a la playa. Estoy esperando a que llegue mi mejor amiga Valeria, está algo atrasada la verdad, se supone que tenía que llegar a las nueve de la mañana pero ya son las diez, tal vez no venga, tal vez sí, no lo sé.

Decido tomar mi celular para poder llamarla. Voy a la aplicación "Teléfono" y marco su número, pero justo antes de apenas poder llamarle se oye como tocan la puerta. Me levanto corriendo a la entrada y abro.

Delante de mí se encuentra una joven de piel blanca con pecas alrededor de su nariz y mejillas, Su desordenado cabello pelirrojo cae sobre el rostro, tapando un poco sus ojos azules claros, sobre estos, tiene algo de sombra peach. Su nariz es ni muy grande ni muy pequeña, aunque es perfilada. Sus labios gruesos solo estan cubiertos por un gloss transparente el cual los hace lucir mas grandes de lo que ya los tiene. Es bastante alta, de hecho es más alta que yo, mientras que yo mido 1.65 ella mide como 1.70, siempre nos molestamos por eso. Ella está llena de sudor y tiene una maleta en su mano, se nota que había corrido para llegar rápido, porque como es costumbre, siempre llega tarde. Es de esas personas que siempre llega tarde a todas partes y te da como excusa cosas tipo "Se comió la tarea mi perro", pero no para que le creas, sino para que te rías y la perdones por llegar mil horas después. Esa mecoide era mi amiga.

—Hola Brunno —Dice su dulce y tierna voz, algo cansada y agitada.

—¿Quieres agua? —Le pregunto con algo de duda en mi voz.

—¿Tan cansada me veo? —Yo sólo asiento y la invito a pasar.

—Te voy a presentar a mi familia antes de darte el agua... —La miro de arriba par abajo y la verdad, se le ve demasiado demacrada.

—¿Estás seguro de que quieres presentarme primero a tu familia? —Dice mientras se apoya en la pared, yo niego con la cabeza mientras suelto una ligera risa —No te quiero ver reír cuando me desmaye, porque siento que en cualquier momento caigo al suelo.

—No seas exagerada y siéntate Valeria —Le ordeno mientras voy a la cocina a por agua.

—¿Ya llegó tu amiga hijo? —Pregunta mi madre, yo asiento. Ella sale de ahí y va a ver a la pelirroja.

—Hola Valeria... Te ves fatal mi niña ¿No quiere algo? —Rio discretamente al oír esas palabras. Ellas dos son como amigas, se ríen juntas y hablan de muchos temas.

—Yo ya le sirvo agua a la pobre —Le paso el vaso y esta se lo toma de un sorbo —¿Te traigo más? —Ella niega con la cabeza.

—Bueno...mhh, entonces creo que te presentaré a mis primos, ven conmigo jirafa —La tomo de la mano y camino hacia Vicente y Alexa. Ellos voltean a vernos y sonríen.

—Bueno bueno, ¿Y ésta quién es? —Vicente arquea una ceja y se levanta.

—Ella es mi mejor amiga primo, demás la has visto en alguna foto que tengo con ella.

—¡Ya me acuerdo! Sí, la he visto, déjame presentarme, yo soy Vicente y ella es mi hermana, Alexa —Esta última solo saluda con la mano mientras termina de guardar las últimas cosas. No es muy expresiva que digamos.

—Un gusto conocerlos, espero caerles bien —Valeria les brinda una sonrisa algo nerviosa y yo le doy palmaditas en la espalda para tranquilizarla. Ella es bastante dulce y tímida, le cuesta un poco relacionarse con la gente, todo gracias al bullying que había sufrido por su estatura en un pasado, pero ya no, seguía siendo tímida y vergonzosa, pero no permite que la molesten ahora.