10) Vientre de Alquiler.
Clyde es un hombre enamorado. Tiene una gran esposa, una buena cuenta en el banco y su trabajo va viento en popa. Pero en su matrimonio hay un sólo problema: su mujer no puede tener hijos. Es por eso que deciden contratar a una muchacha que les sirva de vientre de alquiler. Annabelle es una mujer de carácter fuerte, decidida, inteligente, respondona y jamás se ha dejado pasar a llevar, pero necesita dinero rápido {por X razón; puede que alguno de sus familiares u amigos necesite una operación de urgencia, o el banco esté a punto de quitarle la casa, kcyo.} y la gran suma de dinero que Clyde y su esposa le ofrecen por llevar dentro de su vientre a un hijo que no sería suyo le resultaba muy tentador. Así que accedió, y todo lucía perfecto.
Ella se fue a vivir con ellos a su gran casa, siendo tratada como una más de la familia. Y también fue testigo de cómo la esposa de el amable Clyde iba enfermándose cada vez más y más... hasta morir.
Ahora, no hay más que tristeza dentro de aquella casa pero aún queda un problema que resolver. La mujer había muerto cuando recién Annabelle tenía 4 meses de embarazo, y ahora que Clyde estaba solo... ¿Tenían que hacerse cargos de ese hijo juntos? Las cosas no se podían poner más complicadas...
11) Choque... ¿de corazones?
La vida de Blaz Figgins ha sido de todo menos tranquila. Las carreras ilegales, la velocidad y la adrenalina son cosas a las que está totalmente acostumbrado y es bueno en lo que hace, hasta que la gritona chica de ojos color avellana se atraviesa, literalmente, en su camino, haciéndolo tomar algo de conciencia de sus acciones.
Carter Rogers siempre ha sido una muchacha responsable. Dedicada a sus estudios y a cuidar que sus padres no se maten entre sí, pero no contaba con la jugada que el destino le tenía preparada y despierta en una cama de hospital con un chico totalmente desconocido al frente suyo. Es ahí cuando se desata la tercera guerra mundial entre ellos. Ambos son completamente distintos en todos los sentidos posibles, pero, según la ciencia… los polos opuestos siempre se atraen. Siempre. Aunque no siempre sea fácil, estos de una manera u otra terminan juntos.
¿Blaz y Carter lograrán vencer las diferencias y conformar las dos partes de un todo? Sólo depende de ellos y de qué tan valientes son para sobrepasar las pruebas que el destino les tiene preparadas.
