C h a p t e r T w e n t y o n e

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|J u s t i c e |

Un gran alarido hizo despertar al pelinegro, tallandose con rapidez los ojos, corrió hacia su dormitorio, encontrándose con una aterrada Rose

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Un gran alarido hizo despertar al pelinegro, tallandose con rapidez los ojos, corrió hacia su dormitorio, encontrándose con una aterrada Rose.

— Hey, tranquila. Estás bien — aseguró mientras se sentaba  a su lado y acercaba su cabeza a su pecho — Es Sweet pea. ¿Me dirás quién fue? — suaves caricias recorrían la espalda de la chica mientras su cuerpo comenzaba a relajarse.

— ¿Cómo...? — se detuvo para mirar al chico.
Sweet pea observó con detenimiento sus ojos, rogando por no arruinar el momento.

— Yo atendí la llamada — susurró mientras acomodaba un mechón detrás de su oreja.

— ¿Jug? — desvío la mirada, ¿Cómo le diría a la chica que estaba mal herido luego de unirse a las serpientes y que él había participado en ello, sin sonar tan grotesco?.

— Indispuesto — Rose lo miró confundida, sin embargo, su rostro se torno extremadamente preocupado  — No te preocupes  — mencionó como si pudiera leer sus pensamientos  — Fp le ha dicho a tu padre que te quedaste a dormir. No dijo nada sobre lo de anoche — el tacto del chico hizo que se estabilizara — Pero deberías decirle.

La ojiazul lo miró por una fracción de segundos antes de que sus rostros quedaran relativamente cerca.

— Gracias  — susurró, rozando sus labios, ambos cerraron los ojos y con ello, la cercanía se hacía nula.

— ¿Qué me estás haciendo, Ro? —preguntó antes de sentir los labios de la pelinegra tocar los suyos.

— ¡Oh, mi Dios! — exclamó Fangs desde la puerta — Por eso insistías en que ella se quedara aquí.

La cara del moreno era inigualable, haciendo reír a la ojiazul y sonrojar  al pelinegro.

— Creo que te llaman, Fangs — habló Sweet pea mientras caminaba hacia él y lo sacaba de ahí, claro, sin antes darle una mirada a Rose y desaparecer consigo en el lugar.

La pelinegra miró hacia la pared, con tanta concentración que parecía que nada podía interrumpirla, aunque poco a poco, una gigantesca sonrisa comenzaba a formarse en su rostro.

●●●

No sabía qué era lo más difícil, ocultar su dolor mientras hablaba o ver el rostro de su padre enfurecerse con cada palabra que salía de su boca.
Siempre supo cómo ocultar sus emociones ante las personas, pero cuando se trataba de su familia, la debilidad se adueñaba de ella en menos de un segundo.
Pensó en lo peor cuando lo vio levantarse de la cama y caminar lejos de ella.
Tal vez ver a su padre y hermano tan asustados y furiosos consigo mismo fue la razón para que rompiera en llanto y ambos le abrazaran como si su vida dependiera de ello.
' Lo siento ' susurró entre sollozos mientras estos le intentaban proporcionar todo el calor posible.

— No volverá a acercarse a ti, ni siquiera pensarlo — aseguró su padre antes de salir de la habitación, sin antes besar su frente cariñosamente.

— Todo estará bien, Ro — susurró Kevin contra su cabello, depositando besos descuidados.

Tres hora más tarde, el Five seasons fue arribado por cinco oficiales, incluyendo Tom Keller, quien presentaba una demanda en contra de Nick St. Clair.
Mientras que la mayoría de las personas se percataban del escándalo que los propios padres de Nick hacían, Rose miraba al chico desde una distancia considerable.
Pero al parecer, la pelinegra no pasaría desapercibida.
Durante el trayecto hacia la patrulla, Nick no despegó, ni por un segundo, los ojos de la pelinegra, mandándole una mirada lasciva casi repugnante.

Betty miró todo desde unos metros, su vista pasaba del pelinegro a la que era su mejor amiga.
El miedo y dolor eran tan evidentes que con tan solo ver sus ojos, te transmitía el mismo sentimiento.
Cheryl había llegado minutos antes, culpándose a sí misma por lo ocurrido, sí ella no hubiera insistido tanto, aquello no hubiera ocurrido.

Una sonrisa siniestra se asomó en el rostro de Nick mientras Rose buscaba apoyo de la pelirroja y su hermano.
Tanto como para decirle que probablemente se verían de nuevo, que ellos no habían terminado.

— Rose... — la voz de Betty le hizo apartar la mirada — Lo siento tanto.

Una punzada en su pecho fue suficiente para que Rose recordara las duras palabras de la chica.

— No te preocupes, Betty. Me asombra que te hayas enterado, aún más cuando sé que te atosiga tanto, saber mis problemas.

Oh, Betty, te la estaba devolviendo tan duro y cruel.
Kevin le dio una mirada compasiva, a la rubia antes de perseguir a su hermana y dejarla con Cheryl.

— Lo siento, Betty — tomó de los hombros a la rubia mientras la abrazaba por un corto tiempo, había sufrido lo mismo, solo que en momentos distintos — Todo se solucionará.

Y de un segundo a otro, las calles se despejaron, las características luces rojizas y azules, desaparecieron, el alboroto de las personas se apaciguó y en menos de diez minutos, Betty se encontraba sola.

La llamada entrante de su móvil, hizo que intentara no sollozar.
Contuvo el aliento por unos segundos antes de atender.

— Dime un nombre, Betty. Sé que quieres.

Betty miró el Five Seasons con detenimiento antes de pasar su mirada hacia donde Rose había partido.

— Nick St. Clair — susurró apretando el  móvil con fuerza antes de escuchar la llamada terminarse.






Supongo que es el último capítulo del maratón.

INNOCENT↳SWEET PEA [CANCELADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora