CAPITULO 4: A SOLAS

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Narra Alba

Me monte en el coche con Julia le di un beso María se subió también. Y nos fuimos a cenar al bar de siempre. Mientras ellas hablaban no podía parar de recordar el maldito día en que le compre la camisa que hoy se había puesto, y una sonrisa feliz vino a mí. Julia me tocó la pierna y la miré con cara de susto.

Julia: Ey, ¿Tan fea voy?

Alba: Que estaba pensando.

Julia: Olvídate lo del dinero te prometo que si necesitas....

María: ¡Ey! ¿Estás mal de pelas? ¿Porque no me dices nada tía?

Alba: No, no dejaros de preocuparos de verdad pronto encontraré algo ya lo veréis.

Calme un poco el asunto porque menuda dos necias.

En fin llegamos al bar y guardamos cuatro sillas más para ellos mientras aparcaba, la calle era horrorosa para aparcar pero nosotras no vino a visitar la virgen  porque dimos solo dos vueltas. Llegaron las chicas mientras Damion seguía en su proceso de aparcar.

La verdad es que el bar era un sitio tan conocido para mi, un montón de ocasiones lo he visitado con las chicas incluidas muchas veces con Natalia a solas.

Cuando vino el camarero a pedir nota, Natalia supo perfectamente lo que yo quería tomar y comer.

Camarero: ¿Qué más?

Natalia: Espárragos trigueros con vinagreta balsámico y tomate y un tabule de quínoa. ¿Compartimos no? Alba.

Narra Natalia

Me salió todo espontáneo no fue nada planeado la inercia del sitio, tener Alba enfrente de mí, juro que no fue preparado.

Natalia: ¿Quieres eso no?

Alba: Si, si.

Narra Alba

Me puse algo nerviosa se acordaba de lo que me gustaba, que loco, aun así tenia las miradas de estas encima de mi, menos mal que Marta empezó con alguno de sus chistes malísimos y dejaron de acapararme, yo podía mirar de vez en cuando a Natalia. Odio su lado bueno, es que lo odiaba, ¿Por qué hace esto? Delante de Julia.

Cenamos lo más rápido que pude, quería irme a tomar algo y a un lugar que no tuviera la mirada de Natalia tan cerca, deseaba que ella y Marta estuvieran liadas para no tener que estar aprueba todo el tiempo, pero sabía de sobra que ellas no podía tener nada o eso pensé yo en aquel momento.

Narra Natalia

Sé me fue la olla tengo que reconocerlo, no sé porque hice la escena en el bar, pero una vez que llegara a Pub de Joan iba ir a mi bola, tenía en mi mente la frase de Marta Menos es más, coño porque no había pensado esa puta frase en el bar, me deje llevar por antiguos momentos, que no sabía si se volverían a repetir.

Una vez en el local, fui hacia la barra y Joan me preparo uno de sus cócteles.

Joan: ¡Qué guapa! ¿Quieres que te lo prepare ya?

Natalia: Por favor.

Joan: Ve a la mesa y ahora te  lo llevo.

Natalia: ¡No! Prefiero estar aquí.

Joan: ¿Es por Alba?

Natalia: Stop tu no hablas de Miki yo no hablo de Alba ¿Hay trato?

Joan: Vale, oye, ¿vas a subir al Karaoke?

ESTE AMOR NADIE LO TOCAWhere stories live. Discover now