Tengo un solo propósito. Acabar con esto. A cualquier costo.
Pierda a quien pierda y cueste lo que cueste, sin importar que obstáculos se me presenten en el camino, sin embargo, a mi propósito, se le sumará mantener a salvo a esa pequeña castaña, si...
Intenté separarla de él, pero no podía, pues entre el movimiento brusco de Axel y de Natalie, era peligroso hacer algún movimiento sin que él o yo termináramos heridos, así que comencé a gritar por ayuda.
-L: ¡Camila! ¡Camila! ¡Camila, ayúdame!
Grité y finalmente logré quitar a Natalie de encima de Axel y empujé al pequeño lejos, pero ahora ella estaba sobre mi, intentando morderme, sin embargo, no podía matarla, pues la única arma que traía conmigo, la había soltado al momento de empujar al niño, así que estaba indefensa, solo empujándola por los hombros, evitando que me mordiera.
Así estuve unos segundos, cuando Camila llegó a la habitación, observó la situación y no tardó nada cuando tomó mi arma y le disparó en la nuca, acabando con Natalie.
Yo la quité de encima mio pesadamente, traté de regular mi respiración, mirando al techo y escuchando de fondo el llanto de Axel y la voz de Camila tratando de tranquilizarlo, así que tras un largo suspiro, froté mi rostro y me senté en el suelo, llevando la mirada a Camila, que ahora abrazaba protectoramente a Axel en un intento por consolar al pequeño.
Me levanté en silencio, mirando la escena entre ambos y solo negué, luego, llevé mi mirada al cuerpo de Natalie y tras unos cuantos segundos, la tomé entre mis brazos y la saqué de la habitación, no había necesidad de que Axel siguiera presenciando como su tía terminó.
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Decidí que Natalie merecía un mejor trato luego de que nos salvara la vida tanto a Camila como a mi, así que por eso, estuve las ultimas tres horas cavando un agujero y tras la ultima despedida de Axel a ella, la enterramos, al menos eso podía hacer por ella y por devolverle el favor.
Los tres guardamos silencio unos cuantos segundos, cuando de pronto, el pequeño tomó mi mano y capturó toda mi atención.
-Ax: Necesitas ver algo.
-L: Claro.
Dije con simpleza y seguí a Axel, con Camila a mi lado, y fuimos hasta la parte trasera de aquella cabaña, encontrándonos con una gran variedad de enormes árboles, pero nuestro camino siguió y detrás de ellos, se encontraba un garaje cerrado bajo llave.
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-Ax: Tía Natalie dijo que te diera la llave de aquí, y aquí esta.
Yo miré extrañada la llave, pero la tomé e inmediatamente abrí el garaje, encontrándome con una camioneta realmente preciosa...
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