three

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"¡Joder!" exclamo Calum sorprendido ¿acaso estaba drogada? No, él sabía que no lo estaba, no podía dejarla ahí tirada, un quejido salió de la boca de la chica, así que quizás solo se desmayó, por lo que decidió cargarla.

Ella roncaba. ¿Qué demonios? Esto es muy bizarro, pensó el moreno, así la llevo adentro y la acostó en una de las sillas especiales para tatuar.

La chica comenzó a babear entre sus ronquidos. Trabajar de noche significaba ver cosas fuera de lo común, pero Calum no estaba acostumbrado a aquello, inconscientemente comenzó a rascar su brazo y al darse cuenta de lo que hacía se detuvo.

Al cabo de un instante ella despertó.

"Wow chica ¿qué fue eso?" dijo él sin ocultar lo desconcertado que estaba.

Ella se sonrojo y le extendió su muñeca, llevaba una pulsera de plata con un grabado narcopleptica decía de un lado y al reverso no despertar/dont wake up.

"Te duermes de la nada." exclamo él comprendiendo.

Ella  le sonrió y rebusco en su cartera "Oh no."

"¿Qué sucede?"

"¿Qué sucede? Que soy una perdedora que sale en el medio de la noche sin sus medicinas."

El chico la miró mientras ella seguía buscando desesperada su medicina en su cartera, odiaba depender de ella, pero no tenía de otra.

Calum en cambio comenzó a rascar su antebrazo y ella posó sus ojos en él, el sonido de sus uñas sobre su piel era alarmante.

"¡Detente! Te estás lastimando."

El moreno le hizo caso, a pesar de sus tatuajes se podía notar que la piel donde se rascaba estaba roja y rasguñada.

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