Aquí estoy. Agujero. Cómo ya hace tiempo no estaba. Aplastada. Oscuridad. No creo estar soñando porque en mis sueños acierto con las palabras. Me duele el alma, se me inunda la nariz y los ojos se van de viaje, se cierran, se abren, lloran, duelen, arden. Me digo a mí misma "Qué dependiente", lo de siempre. Los sonidos son más irritantes ahora, los movimientos más bruscos. Tú no vuelves. Estoy aplastándome a mí misma, tiemblo y no agarro con la suficiente fuerza los objetos. Los vasos para tomar, las pastillas para meterme a la boca. Todo se cae, se caen conmigo. Me acuesto y me quedo quieta un momento, parece que estoy delirando, parece que ya pasaron 80 años. Aún no vuelves. Cualquier cosa me parte, mis arrugas pesan, la piel se resbala de mi carne. Solo tengo palabras malheridas que se desprenden de mis ojos y llegan a mis labios con sal. No puedo evitarlo, te espero. Sé que no es añoranza, es miedo de la espera. Sostengo con mis manos la cara. Intento quedarme. Me quedo esperándote.
YOU ARE READING
Amor despiadado
PoetryLos poemas de Amor Despiadado reflejan en cada situación esta condición despiadada que deja el corazón frío con un dolor punzante y molesto. El amor despiadado es un amor que hiere por su sinceridad y por la valentía de sus palabras, debido a que ni...
