TABLE 13

Chapter XXV

POV Key

Me despedí de JaeWoon, salí del coche y se fue. Esperé unos minutos antes de entrar, no quería ni si quiera que se imaginara que lo había visto todo, esta vez iba a esperar a que me lo dijese.

Introduje la llave en la cerradura y abrí la puerta lo más sigilosamente posible, pero... Hizo ruido igualmente, la verdad. Cerré la puerta y al girarme me encontré a Michi, con una percha entre las manos y cagada de miedo. Me bloqueé...

-¿No se supone que habías venido antes a casa? ¿En serio acabas de llegar? -cruzó los brazos como si no hubiese estado amenazándome con una percha hace unos segundos.

-Eh... no, iba a... –intenté buscar una excusa... Tendría que haberla pensado antes.

-Tía, sigues vestida y tienes la mochila colgada en tu hombro, además que he escuchado la puerta de la entrada... No sirves ni de espía ni de mentirosa. –que infravalorados tenía mis talentos.

-Oye, déjame –dije- Por cierto, ¿por qué tienes una percha? –señalé la percha y Michi la miró confundida, ni se acordaba.

-Eh... Para defensa propia, hasta mañana –sin decir nada se giró y entró a su habitación, no pude evitar morirme de risa. Esta chica...

Negué con la cabeza y me dirigí a la habitación, el dolor de cabeza había vuelto.

Cogí la ropa y me fui a duchar, era tarde, pero sentía que debía.

''Por fin'' suspiré mientras me tiraba en la cama. De nuevo había sido un día más que ajetreado, estaba cansadísima. Normalmente miraba el teléfono antes de dormirme, pero esta vez, no tuve si quiera fuerzas para eso y me dormí.

El sonido de la alarma sonó y no pude evitar sobresaltarme, me había pillado en medio del sueño profundo. Me senté en la cama y toqué mi cabeza, no había mejorado.

Me levanté y dirigí al baño para arreglarme. Era extraño, la puerta de Michi seguía cerrado... ''Ya se levantará''- pensé.

JÁ.

-¿PERO TODAVÍA SIGUES DURMIENDO? ES CASI LA HORA –grité a Michi mientras le abría la puerta enfadada, íbamos a llegar tarde.

-CASI ME DA UN INFARTO –dijo sobresaltada.

-Si no llega a ser por mí ni te despiertas, qué desagradecida –salí de allí.

Salimos escopeteadas de casa, al llegar a la cafetería, preparamos todo con rapidez mientras desayunábamos y finalmente abrimos.

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Pasaron las semanas y las cosas siguieron bastante monótonas, los chicos habían dejado de venir tan a menudo, supongo que era porque no habían tenido tiempo; excepto RaeSung.

RaeSung y Michi se veían cada día, con la excusa de que Rae le estaba enseñando a producir y esas cositas, pasaban más de la mitad del tiempo libre juntos. Incluso había estado yéndome sola a casa, Michi se quedaba hasta tarde con el chico en la cafetería.

Me alegraba mucho por mi amiga, la verdad, durante estas semanas había estado conociendo más a los chicos y sinceramente, RaeSung era el chico ideal para Michi: se complementaban.

Por otra banda, mi amistad con JaeWon se había deteriorado un poco... No sé cómo había pasado, pero ambos nos habíamos distanciado, había notado como me estaba evitando, la verdad es que se había hecho muy obvio... No entendía el por qué, pero tampoco quería averiguarlo, estaba molesta; molesta por el momento en el que había decidido hacer todo esto, molesta porque no entendía el por qué y aunque en un principio ansiaba preguntarle, cada vez que lo intentaba: huía. Me había cansado.

Michi llevaba días insistiendo en que hablara con él, pero... ¿Cuál era el punto? ¿Ir detrás de una persona que me había empezado a ignorar después de darnos un par de besos? No, gracias.

-Buenos días –miré hacia la puerta y vi a JunKyu con una sonrisa, le sonreí de nuevo.

-Buenos días –me dirigí hacia él y le abracé. Conocí a JunKyu hace poquito, pero la confianza que habíamos cogido ambos era increíble. Acompañé al chico a la mesa y cogí nota de lo que quería, lo preparé y serví.

-¿Estarás solo? –pregunté confundida, JunKyu no solía estar nunca solo. El negó. Ah.

-Ahora vendrá DoYoung, estaba acabando de practicar la coreografía... -miró hacia la puerta lo cual hizo girarme, DoYoung sonriente no saludó.

-Buenas tardes –dijo y le correspondí al saludo- ahora vendrán los demás –miró a JunKyu mientras se sentaba y éste asintió. Tomé nota a DoYoung y le serví, mientras lo hacía sonó la campanita de la puerta, era Yawah, Dusty y JaeWon. Con las confianzas entraron y se sentaron en la que habían nombrado ''su'' mesa. La mesa número 13. Vi como Michi se acercaba para saludarles y crucé la mirada con JaeWon, rápidamente retiré mis ojos de los suyos y seguí con el trabajo.

-Buenas tardes –dije mientras pasaba rápido por la mesa para no ser mal educada.

-¡Hola Key! –saludó Yawah demasiado contento, me giré un poco mientras entraba a cocina y le sonreí. Este chico. Al salir, me fijé en que había llegado ByoungGon, HyunSuk, SeungHun y YeDam.

La tarde pasó rápido, la verdad últimamente tenía tantas cosas en la cabeza que todo me parecía una buena excusa para volcarme completamente y olvidarme de todo: el trabajo era lo mejor para olvidar.

Los últimos clientes salieron por la puerta y Michi y yo miramos a nuestro alrededor, ni si quiera parecía que hubiésemos cerrado. Miré a Michi.

-Es como si no hubiésemos cerrado –dijo riéndose.

-¿Les cortamos el grifo o qué? –pregunté riéndome- ¿Los echamos? –Michi me golpeó en el hombro.

-¡Tía! –ambas nos reímos y cuando nos dimos cuenta, casi todos nos estaban mirando. Si, casi. Nos aclaramos la garganta y aunque Michi se paró un momento en la mesa de JunKyu, le encantaba hablar con HyunSuk y los demás chicos, se fue con Yawah, Dusty y JaeWon.

-¿Habéis cerrado? –preguntó YeDam y asentí.

-Deberíamos irnos... -Siguió ByoungGon.

-No, no, no tengáis prisas, todo bien –sonreí y me fui hacia la cocina. Michi seguía con los chicos, y lo prefería así; no me sentía muy bien. Todos los chicos disfrutaban de su compañía, pero cuando estaba yo, siempre habían silencios incómodos o JaeWon acababa yéndose así que simplemente, no iba a ir con ellos: lo tenía muy claro.

Recogí la cocina y salí para cambiarme, Michi seguía con los chicos y la mesa de JunKyu estaba por irse.

-¡Key! –exclamó JiHoon- Nos vamos ya –sonrió. Me acerqué a ellos y me despedí, les acompañé hasta la puerta, abrí y se fueron.

-¿Nos vemos mañana? –dijo SeungHun, quien se había quedado último. Le miré y asentí sonriente- Hablamos por teléfono entonces –sonrió nuevamente, asentí y se fue.

Vi como los chicos se alejaban y cuando me quise acordar tenía todo el cuerpo congelado y me temblaba todo. Entré rápido y suspiré llamando la atención de Michi y los chicos.

-¡Key! –dijo Michi- ¿Estás loca? ¡Te vas a congelar!

-Ha sido sólo un momento... -dije.

-Da igual –su voz resonó en toda mi cabeza. Michi, los chicos y yo le miramos fijamente, pero él seguí con la vista clavada en el ordenador. Ni si quiera me miró. Le miré molesta y me fui rápido hacia la salita para cambiarme. Me cambié lo más rápido que pude y salí.

-Michi, ¿cierras? –pregunté casi sin mirar a mi amiga.

-Si pero... -interrumpí.

-Hoy me voy sola. Nos vemos en casa. Adiós –me despedí y salí casi corriendo de allí, estaba demasiado enfadada como para quedarme a ''solas'' con ellos.