Capitulo 13

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Algunos murmullos fuertes me despiertan. Siento un dolor crudo en mi estomago, toco mi cabeza y con solo el contacto de mis dedos helados producen una maldita migraña mortífera.

Confundida y mareada volviendo a recordar todo lo sucedido de ayer a mi cabeza, me levanto lentamente escuchando abrir la puerta de golpe.

__Es tu día muñeca, ven con nosotros.

Retrocedo unos pasos y los miro con asco. No puedo hacer nada porque se que de todas formar seré vendida como un maldito objeto cualquiera.

__Malditos infelices pagaran por esto se los juro.

Me sostienen bruscamente llevándome a rastra a no se donde y aunque quisiera hacer otro intento de huida no puedo es imposible.

__Estaran arreglándote y te dejarán lista porque dentro de unas horas nos iremos lejos muñeca así que es mejor que colabores y trates de obedecer princesa y nos haga las cosas fácil y verás que todo saldrá de maravillas.

Escupo su rostro con rabia, Cubro mi rostro a ver que su mano se va dirigiendo hacia mi, aún con mis ojos cerrados esperando esa golpiza que nunca llega, por suerte.

Ahora solo soy arrastrada por estos gorilas dejando al desgraciado encabronado detrás.

Quisiera morir de una vez por todas.

*****

Estas putas me despojan la sucia tela que tenía cubriendo mi cuerpo delgado, siento un escalofrío recorrer todo mi cuerpo y unas ganas maldita de gritar.

__Cambia esa cara de moquita muerta deberías de brincar de felicidad estarás con los más grande zorra rodeada de magnate forrado en billetes.

"Puro oro mi reina, puro oro"

Trato de retener mis ganas de sacarle los ojos y solo ignoro el hecho de que esta puta solo tiene basura en su cabeza y quizás ni basura tenga, es demasiado fino para lo que se debe de encontrar en lo que se dice ser su cabeza.

No se en que terminara esto pero algo me dice que solo es el principio de un maldito infierno el que se aproxima a mi vida.

Colabora cabrona que no tenemos todo el tiempo, tampoco es que queda muy cerca el lugar son 3 benditas horas así que date prisa.

Me entrega unas cuantas telas lo que se supone que es mi vestimenta.

¡Que asco!

Entro a un vestidor y lo primero que veo es mi rostro reflejado a un espejo.

Piel pálida, unas cuantas libras menos y unos ojos hinchándos así me encuentro, devastada completamente con unos cuantos moretones en mi estomago, brazos y piernas.

Colocó la ropa interior crema y unas cuantas lágrimas se empeñan en salir pero esta vez la detengo.

Me preguntaría si allá fuera hay alguien interesado en un estorbo como yo.

La única persona que estaría interesada se encuentra bajo tierra.

Salgo del vestidor y me dirijo donde la puta, esperando que me coloque algunas prendas que sostiene en sus manos.

Unos labios rojos, un pelo ondulado y unas zapatillas. Ya Me encontraba lista para ser tirada como carne a lobos hambrientos en busca de mercancía sin probar.

__Esta lista muñeca.

Lo único satisfactorio de salir de esta pocilga es que no volveré a ver mas el rostro de este cerdo enfermo, no se que infierno me espera afuera pero ese maldito rostro de este animal es una pesadilla para mi que no quisiera ver más.

Baris Obsesión Donde viven las historias. Descúbrelo ahora