Un Acompañante de Lujo [Jaehyun]

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Millie encendió una última vela y se apartó para contemplar el efecto; la iluminación justa y la sombra justa. No quería estar completamente a oscuras. Y ahora mismo se estaba creando un problema mental por no saber como lidiar con sus nervios.
Ya lo había tocado, sentido .., pero de nuevo se sentía como la primera vez.

Se alisó los pliegues sedosos del camisón. Le quedaba perfecto aunque por breves momentos había pasado que no le quedaría como quisiera. Pero al verse al espejo se sorprendió de verse tan llena de vida y esperando por placer. Un placer que sólo Jung Yoon Oh, le podía regalar.

El mismo la había dejado al pie de su recámara al término de la cena. Le dijo que en veinte minutos estaría ahí, claro le estaba dando el tiempo para que se preparará.
Para eso, solo faltaban cinco minutos.
Y ya con todo listo, ¿qué más podía hacer antes de que llegará?.

'Ve a sentarte en la silla y lee un libro hasta que llegue, o al menos finge que lees'

Sin embargo no tuvo que esperar mucho, Jae llegó completamente puntual. Al introducirse a la habitación. Millie contemplo que venía solo con un pantalón de algodón que le quedaba por arriba de la pantorrilla. Una camisa en tirantes.
Lo disfruto en esa sola vista.
Los hombres de ciudad eran los más atractivos.

Los nervios fueron reemplazados por la ansiedad de volver a sentirlo suyo, por la excitación que le provocaba el solo verlo ahí de pie y con ambas manos en sus bolsillos, mirándola con cariño y una  sonrisa poderosa que incluso le dejaba ver la maravilla de sus dos hoyuelos en sus mejillas.

─Daría diez mil won por saber lo que estás pensando, Kang Millie

Ella se rio.

─Creí que sería mil won

Jae se encogió de hombros y ocupó la silla que tenía delante.

─Tus pensamientos valen incluso más de un billón para mí ─mencionó con seriedad─,  cuéntame

─Estaba pensando que siento como si te conociera desde hace más tiempo, sé que es una estupidez  ─sonrío mientras negaba con su cabeza─, nunca te había visto antes, pero sólo lo siento así

─Hay religiones primitivas que creen que las almas se conocen en los sueños, incluso antes de que se encuentren en la vida  ─explicó Jae─, tal vez nos conocimos ahí

─¿Crees en esas cosas?

─Creo que deberíamos tener cuidado con lo que desechamos apresuradamente solo porque nos parece improbable, sobre todo cuando tanta gente lo creía

Millie se inclinó hacia delante y coloco sus hombros encima de la mesita que tenían entre ellos. Él hizo lo mismo, su seriedad con la que hablaba le estaba atrayendo.

─¿Entonces no es una casualidad?

─Que nosotros estemos juntos es improbable y sin embargo, aquí estamos. Algo deseaba que ésto ocurriera, han tenido que ocurrir muchas cosas para que estemos aquí ahora mismo  ─Jae abandonó la silla y tomando sus manos, se arrodilló frente a ella─, creo fielmente que estábamos destinados a encontrarnos, Millie

Sus manos transmitían fuerza y calor mientras ella le mantenía la mirada.

─¿De verdad crees eso?

─Lo creo, Millie  ─su voz sonaba aterciopelada h sus ojos estaban ocusrrcidos por el deseo mientras hablaba. Entonces se apartó de ella, se levantó y la arrastro consigo como había hecho durante la cena. La contemplo de arriba a abajo estando fe pie─, el encaje te sienta perfecto  ─murmuró.