Me robas, te parto el cuello

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Sonreía un poco mientras comía unas gomitas, su rostro seguía malogrado pero estaba feliz por haber puesto en su lugar a Cartman. Desgraciadamente su sonrisa no duró mucho.

El mismo muchacho con el que había peleado ayer por la noche apareció por la puerta de la tienda haciendo que la pequeña campana que estaba arriba de este anunciara su llegada. Su ojo izquierdo estaba hinchado y morado, al igual que su mejilla.

Rodó los ojos aburrido por su presencia, decidiendo ignorarlo y no amargarse el día... por ahora.

Eric dio una vuelta por toda la tienda, observando los alimentos en las despensas y abriendo constantemente el frigorífico sin tomar ninguna bebida. Finalmente se acercó a la caja y observó las múltiples revistas es estaban exhibidas, tomó una al azar y pretendió leerla.

──¿Qué tal te trata la vida, amigo mío? ──Preguntó de repente, Kyle dejó de comer por unos segundos y lo miró con extrañés.

──Son tres con veinticinco por la revista para nenitas.──El castaño de inmediato miró la revista e hizo una mueca. Era una de esas revistas de moda y mierdas de consejos para mujeres que temen perder la "chispa y la pasión", tal vez debió mirar antes de tomarla.──¿Quieres una falda y labial también? Creo que mí madre tiene de tu talla, puedo vendertelo barato.──Se burló de él, Eric fingió reír pero luego lo miró mal.

──Muy gracioso Broflovski...──Soltó la revista y tomó unos chicles de frutas, abriendo el paquete para comenzar a masticar dos.──Pero no vengo para eso..

──Vienes a comerte los productos de nuevo sin pagar, blah blah blah, la misma mierda.──Estiró su brazo hasta el del regordete aprovechando que estaba apoyándose de la vitrina y lo pellizcó, haciendo que se quejara y lo mirara con odio.──Un dólar por los putos chicles, gordo.

──Gorda la puta de tu mamá, Khal.──Se quejó, aún así llevó su mano a su bolsillo derecho y sacó su billetera para luego darle el billete de un dólar.──¿Satisfecho?

──Bastante.──El pelirrojo sonrió abriendo la caja registradora para guardar el dinero.

──¿No vas a preguntarme que tramo?──Kyle negó divertido, Eric bufó.── Aguafiestas.

Se dio la vuelta para salir por la puerta, pero se detuvo de repente. El judío lo miró de reojo, llevando a su boca otra gomita de fruta. El antisemita volvió a darse la vuelta para regresar a la caja, quedando frente a frente con el pelirrojo.

──¿Sabes que sería divertido?──Escuchó un '¿Qué?' En respuesta y esbozó una sonrisa un tanto malvada y traviesa.──Tú, yo. En el piso del almacén, no sé, piénsalo.

El pelirrojo casi se atraganta con la gomita de fresa, tosió varias veces mientras su rostro enrojecía, tal vez por la falta de aire o la vergüenza. El castaño rió a carcajadas y Kyle como pudo habló: '¿Es broma?'

──Por supuesto que bromeo, no soy un puto maricón.──Kyle estuvo tentado a responderle un: 'Claro que lo eres' pero se mordió la lengua para no hacerlo.──Pero hablando enserio, perra judía.──Broflovski lo miró mal.──Tengo un trabajito para ti~

──¿Y qué te hace creer que confío en ti?──Eric fingió estar indignado y llevó su mano a su pecho, pretendiendo estar dolido.──Es la verdad, la verdad duele.

—Pensé que te interesaría ganar dinero extra~ pero creo que me equivoqué, aún así quiero a un judío en mi negocio para manejar las cuentas.—Kyle rodó los ojos por el estereotipo.—Te daré el treinta porciento de las ganancias, sin intereses.—El interés de Broflovski aumentó notablemente.

—Espero que sea legal. —Eric rió con ganas, incluso unas cuantas lágrimas se escaparon de sus ojos.

—Eres muy gracioso, ¿Lo sabías?

(...)

—¿Me estás jodiendo?

Miraba un camión de helados viejo y un poco oxidado, ¿Esa cosa aún se podía mover sin dejar un neumático atrás?

—Para nada.

Cartman abrió la puerta trasera y observaron un montón de basura adentro, tendrían que limpiar ese desastre. Pero ganarían buen dinero, y claro, Kyle en un principio no estuvo de acuerdo, pero luego de una semana entera de hostigamientos por parte de Eric no pudo negarse a entrar en aquel negocio y claro, lo amenazó con un "Me robas, te parto el cuello", convenciéndose a sí mismo de que tenía un buen motivo para hacerlo.

Nichole.

No eran novios, ella ya tenía a alguien, un chico rico llamado Token, pero eso no evitaba que de vez en cuando se encontrarán para hacer más que estudiar y hablar de basketball. Su plan era reunir un montón de dinero y comprar boletos para toda la temporada e ir con ella.

—Eh, gordis.—Cartman volteó un poco su rostro al reconocer esa voz, sonrió cuando Kenny estuvo a su lado.—Está aquí, mis felicitaciones.—Se refería al judío, quién tiraba sin mucho esfuerzo varias cajas fuera del camión.

—Es un hueso duro de roer.—Se cruzó de brazos observando fijamente al pelirrojo. 

Era un día un poco caluroso, el invierno había terminado dándole paso al verano. El judío no usaba su típico abrigo naranja, usaba una franela sin mangas blanca dejando a la vista sus brazos un tanto formados, sus típicos pantalones ajustados y rotos en las rodillas. Sudaba un poco generando que su franela blanca fuera translúcida en algunas partes, pegándose a su abdomen.

—Creo que estás babeando, cierra la boca.—Golpeó a Kenny en el hombro y este rió a carcajadas.

—Vete a la mierda pobre.—Le hizo una seña obscena con su dedo medio, para luego indicarle al recién llegado, Butters, qué debía hacer.

Después de hacerlo se dirigió a donde se encontraba Kyle, esbozando su mejor sonrisa.

—¿En qué puedo ayudarte, Kyel? — El judío lo miró de reojo y luego señaló unas cajas con mercancía.

—Llévalas adentro, pero no las mezcles, ya las ordené.

Sería un verano interesante. Pero claro, las prioridades primero, hundiría al pelirrojo fingiendo ser su aliado.

N/A: Jujuju~ :^
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