Capítulo 27: Sin salida

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Sus pasos lo dirigieron al cuarto donde habían pasado tantas noches juntos, su mirada se posó en la cama, se le hacía demasiado grande para él solo, lo extrañaba como nunca había sentido, pero al escuchar lo que le había pasado estaba más seguro que era lo mejor, a su lado jamás estaría seguro, tenía que morir primero Takuma Fudo, y sabía que eso no pasaría... no después de todo lo que había logrado.

–Lo perdí... –el silencio se le hizo más pesado que nunca, pero había decidido eso, y debía pagar todo el dolor que le estaba ocasionando a Ginji, se recostó en la cama, hundiendo su rostro en la almohada del rubio, el dolor que sentía era sorprendente, sentía que no podía respirar. Negó con la cabeza y abrazo con más fuerza la almohada, debía ser fuerte por Ginji, por Himiko, porque al final, tenía que protegerla... era la promesa que le había dado a Yamato.

*****

Parpadeo sintiendo dolor por todo su cuerpo, la luz le molestaba, sentía como su cabeza estaba por estallar, abrió lentamente los ojos tratando de acostumbrarse y después de algunos segundos pudo enfocar bien la habitación, dejo salir un suspiro, otra vez en un hospital.

Miro a su alrededor y no había nadie por lo que arrugo el entre cejo, ¿dónde estaban sus amigos? Volvió a cerrar los ojos, tratando de calmar el dolor de cabeza, sin contar el de su cuerpo, ¿qué es lo que había pasado?, tras unos segundos lo recordó, el loco del auto, ¿en verdad tenía tan mala suerte?, lo único que quería era tener una vida tranquila con la persona que más amaba, aunque claro, no era correspondido del todo, pues la sombra de un muerto se interponía.

No supo en qué momento se volvió a dormir, pero cuando despertó vio a Teshimine a sus pies, mirándolo

–Eso es acoso –susurro dejando salir una suave risa.

–Pues te acosare las 24 horas –estaba por reírse pero al ver la cara sería se detuvo

– ¿Qué ocurre?

–Intentaron matarte, eso pasó.

–Vamos Teshi, eso no puede ser posible, debe haber una conf... –al verlo se quedó callado, en verdad lo intentaron matar, pero ¿por qué?

–Hable con tus amigos y no puedes verlos, en realidad no puedes ver a nadie –espero unos segundos y al ver que no preguntaba por el violinista decidió hacerlo él –le dije a Midou que no podría verte...

–No era necesario eso, no le intereso lo suficiente.

–Debes olvidarlo, será lo mejor, antes no me importaba eso si tan sólo eras feliz, pero cambie de opinión –se acercó a la cama esperando su reacción –no es seguro que estés con él, no dejaré que sigas a su lado. Cuando acabe este trabajo... ven conmigo, vámonos lejos.

Lo miro a los ojos, veía determinación en los ojos de Teshimine, estaba hablando en serio, y sabía que tenía que hacer eso, olvidarlo, y la mejor manera era esa, irse lejos y no encontrárselo...

*****

Los días pasaban sin cambios, nadie podía ver a Ginji, algo que ya estaba sacando de quicio a sus amigos, tenían el derecho de verlo, Teshimine estaba loco si pensaba que seguirían sin hacer nada, aquí el último que tenía derecho de estar al lado del rubio era él, ¿Quién era el que se había ido de su vida? ¿Quién era el que lo había destrozado con su ausencia?

Ese día habían citado a Teshimine en una cafetería, le expondrían lo que sentían y si no lo entendía era su problema, ellos verían a su amigo. Shido y Kazuki evadían sus miradas, habían tenido muchas discusiones desde que el rubio no estaba, la razón era hablar de Ban.

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