Young Blood (Byungchan X Seung Woo)

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             °˖✧ Capítulo 4 °˖✧

Seung Woo miró fijamente abajo, desconcertado por el pequeño meretriz que estaba chupando su polla tan cariñosamente. O ByungChan era un excelente actor, o él realmente disfrutaba este acto. Seung Woo encontraba mucho placer en el suyo (ambos, en chupar y ser jodido) aunque era generalmente acompañado por sentimientos de culpabilidad y pena. A pesar de que había dicho al chico que no había nada vergonzoso en amar a otro hombre, fue duro de hecho creérselo. SeungSik siempre había tratado esa parte de él con un ligero desprecio, como si Seung Woo no fuera bastante respetable porque le gustaban otros de su mismo sexo. Había algo increíblemente liberador, Pensó Seung Woo, en estar con alguien quien no solo respetaba esa parte de él sino que tenía los mismos sentimientos.

No había duda de que ByugChan tenía esos sentimientos. Los ojos color avellana observaban los de Seung Woo, burlones y sensuales a ratos mientras él permitía a su lengua deslizarse sobre el ancho eje. Él bebía el pre-semen que fluía de la punta de la polla de Seung Woo como si fuera néctar y chupaba impacientemente por más. Y cuando finalmente tomó la cabeza dentro de su boca, seguida por lo mas ancho del eje, lo hizo como si no pudiera tener suficiente.

Seung Woo puso alrededor sus largos dedos en el pelo del chico y miró como ByungChan mamaba su eje. ¡Dios! Él nunca había estado con nadie que fuera capaz de tomar tanto de él. En varias ocasiones, cuando tuvo aventuras fuera de su relación con SeungSik, los hombres con los que había ido a sombríos callejones y oscuras esquinas habían podido apenas encajar la cabeza de su polla en su boca, y ninguno le había permitido penetrarlos. Eso no es lo que Seung Woo realmente buscaba, siempre había preferido mantener ese único encuentro sexual con SeungSik sagrado en su memoria, no tocado por otras experiencias. Ahora viendo a ByungChan tomar toda su polla con talento en su boca y prácticamente suplicar por más, él se sorprendía de lo que se había estado perdiendo.

La increíble vista erótica del chico arrodillándose ante él, chupándole tan impacientemente, hizo que la sed aumentara en Seung Woo como nada lo había hecho en mucho tiempo. Él recordó el sabor que tenía la sangre de ByugChan y apartó el pensamiento rápidamente. Pensando qué hacer. Si mordía al chico una vez y lo alejaba, él sólo marcaría otra vez el diseño de otros vampiros. Pero si el decidía que le gustaba ByungChan y quería conocerle más (y estaba empezando a sentir eso, a pesar de cómo ellos se habían conocido brevemente), un segundo mordisco provocaría problemas. Porque si no podía controlarse y mordía a ByungChan de nuevo, los químicos en su veneno harían adicto al chico y atarían a Seung Woo como SeungSik había sido obligado por él. Especialmente si lo follaba al mismo tiempo. «No pienses en eso, se ordenó. Eso está completamente fuera de discusión y tú lo sabes.» Aun así, la sed era fuerte en él, y era difícil ignorarla.

El placer crecía dentro de él, una presión en sus pelotas comenzando a liberarse mientras el lindo chico continuaba chupando y lamiendo, arremolinando su lengua alrededor de la cabeza de la polla de Seung Woo un momento, y al siguiente, tragando todo el eje abajo de su garganta. Seung Woo no quería que las calientes y húmedas sensaciones acabaran nunca, pero no había estado con otro hombre en meses, no desde que el hastío se había apoderado de SeungSik, y comenzó a pedirle a Seung Woo que no le mordiera más. Se iba a correr muy pronto, y él no quería herir o sobresaltar al joven que estaba sirviéndole tan maravillosamente. Suave pero firmemente, sacó fuera de la boca de ByungChan su palpitante polla, a pesar de que era la última cosa que quería hacer.

─Hey, ¿Por qué hiciste... por qué hiciste eso? ─Los ojos de ByugChan estaban entreabiertos con lascivia, sus rosados labios estaban temblando y amoratados; irresistible.