♥conғυѕιonѕ♥

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-¿Cheryl?

La figura se dió vuelta dejándo ver a la persona menos esperada. Mis ojos se cristalizan y pongo una mano en mi pecho el cuál subía y bajaba por la respiración entrecortada.

-Heather...- Digo con una voz débil.

-No...Realmente no es ese mí nombre ahora, Heather ya no existe. Ahora me llaman Peach-- Dice la rubio fresa y me quedo callada.

Me doy la vuelta y me voy corriendo mientras escucho como ella trata de llamarme pero fracasa. Voy corriendo hacia el adentro de Riverdale mientras mi corazón latía a mil. Pensaba que Heather se había ido a otro lugar lejos de aquí,  pero veo que en realidad...Siempre la tuve a unos kilómetros de mí.

Pero ya era demasiado tarde, mi corazón estaba con alguien más y esa era Antoinette Topaz.
        
Camino mientras quito mis lágrimas las cuales tardaron en dejar de salir pero lo hicieron. Caminé y caminé hasta llegar a la iglesia la cuál estaba vacía y con las velas a los costados haciendo un camino derecho. Niego con la cabeza repetidamente y me niego a entrar, me voy de allí rápido.

Ya no era bien recibida a esos lugares, la gente aquí y en la mayoría de las iglesias tienen un pensamiento demasiado hipócrita. Pues dicen que Jesús perdona todos los pecados y siempre aceptará a cualquiera. Lo dice la ciencia, los sacerdotes, la gente y la misma biblia. Pero no es verdad, cuándo al fin admití mí sexualidad vine aquí con Toni y no fuimos bien recibidas. Por supuesto que no.

No iba a entrar a un lugar con hipócritas cerrados de mente, me sacaban de quicio con sus estúpidas canciones y rezos a un "Dios mágico todopoderoso".

En fin, volviendo al tema...Avancé un poco más hasta llegar a un bar que no era el Wyrm. El olor a alcohol y sexo inundó mis fosas nasales pero no me importó. Me dirigí a la barra dónde comencé a llorar tapando mi rostro con mis manos.

Lloraba por todo, por Toni, el encuentro con Heather...Todo, absolutamente todo me tenía devastada. De repente sentí un toque en mi hombro. Miro a la persona y era un chico alto, rubio y de unos ojos celestes muy lindos pero no era mí tipo, era un chico después de todo.

-¿Te encuentras bien?- Pregunta él y yo pongo cara de obvia y frunzo el ceño - Ok...Eso lo tomaré cómo un no. ¿Quieres contarme que te pasó?

Veo cómo se sienta a mi lado y muy pegado a mí.

-No- Dijo secamente y me alejo un poco.

-Vamos, puedes confiar en mí- Que insistidor e insoportable. Todos los hombres son iguales, por algo me hice lesbiana y no me arrepiento ni un poco.

-Me preguntaste si te quería contar y mi respuesta es no. Y...Ni siquiera confío en la gente que me conoce de toda la vida, imagina contigo...Un completo desconocido- Digo fría e intento irme pero el chico agarra mi brazo.

-¿Me puedes dejar ir?- Pregunto harta de la situación.

-No hasta que me digas que te pasa, eres tan hermosa...Chicas cómo tú no deberían derramar lágrimas de esa manera- Giro los ojos e intento irme otra vez, fallando en el segundo intento. Ese desconocido aumentó la fuerza con la que tomaba mi brazo y me lastimaba. Me quejo.

Ahora frunzo el ceño completamente y me logro soltar de su agarre. Me doy la vuelta, suspiro pensando para irme pero...Tuve una idea mejor. Dí la vuelta viendo de nuevo al chico y le dí un puñetazo inesperado o eso me hizo entender viendo como casi se cae del banco.

-Tienes razón, no debo gastar lágrimas y mucho menos mi tiempo con idiotas mujeriegos cómo tú- Digo y me voy hecha una furia.

No volvería a pisar ese lugar, lo tenía claro.

Recibo una llamada telefónica de Verónica y atiendo.

--¿Hola V?-- Pregunto.

--Cheryl...Ven a mi casa...Porfavor...-- Claramente estaba llorando, me preocupo y camino en dirección  a su casa.

--Estaré ahí enseguida, Ronnie- Susurro y corto la llamada. Llego a su casa y toco el timbre.

Veo como la reja se abre y entro a la casa. Abro la puerta y veo que no hay nadie. Cierro ésta y subo hacia el cuarto de Verónica.

Qué le habrá pasado, aún no lo sé. Pero se oía débil.

Toco la puerta de su cuarto y ella me hace entrar de un tirón en el brazo.

Nos sentamos en su cama y la miro agarrando sus manos.

-Ronnie...¿Qué te pasa, por qué estás así?-

-No es fácil decirlo...Es qué no sólo es una cosa...Son dos cosas muy importantes...Y ambas son difíciles de explicar.- Dije entrecortadamente.

-Vamos...Somos inseparables y sabemos todo o bueno, ahora casi todo la una de la otra. Puedes confiar en mí, sabes que te apoyaré siempre. Escúpelo y te quitarás el peso de encima- Sonrío de lado y la miro tratando de tranquilizarla.

Ella agarra una de mis manos y llorando la coloca encima de su vientre, abro bien grandes los ojos.

-¿QUÉ!? ¿CÓMO!?- Exclamo y ella baja la mirada- Es decir...¿Quién és el padre y como sucedió? Sea como sea te apoyo, siempre lo hago.

-Archie Andrews...Lo sé, no era mí tipo pero una noche estuve muy mal, él me hizo sentir muy bien y...Pasó lo que tenía que pasar- Dice entre sollozos y yo la abrazo.

-Entiendo...Pero Verónica, deberían haber usado protección...Mira si él tenía una enfermedad o algo- Susurro y ella se aleja mirándome a los ojos.

-Usamos protección. Se rompió y no me agregues más preocupaciones,  ¿Quieres?- Dice Vero y asiento con la cabeza.

-Tienes razón, lo siento. ¿Qué otra cosa me querías decir?- La miro ahora fijo a los ojos.

-Bueno...Tuve confusiones estos últimos días. No sólo por lo de mí embarazo...Es qué descubrí cosas que dieron un giro a mí vida- Escucho atenta y decido decir algo.

-Te entiendo, a mí también me pasaron cosas...Me encontré con una chica que era algo anterior a Toni...Aluciné con que la había visto y...- Ella me interrumpe.

-Aguarda un poco, es que una de las cosas que descubrí es que me gusta alguien...Una chica- Dice nerviosa y la miro sorprendida.

-¿Quién es esa chica si se puede saber?- Digo intrigada.

-Esa chica...Esa chica eres tú, Cheryl Blossom- Me sorprendí más que antes y antes de poder responder...Me dió un beso.

El beso.

☁ᴍʏ ᴀɴɢᴇʟ☁ 『cнonι』Where stories live. Discover now