NO Te Enamores De Mi **Completa**^

El encuentro de esa noche...

Samantha

El agua de la pequeña cascada en la alberca se siente bien en mi rostro, trato de borrar el ultimo recuerdo que tenia de James, ese día en el que me dolió perderlo, ese día que decidió romperme el corazón, pienso «fue mi culpa, no llegue a tiempo al aeropuerto» «no debi recibir un no como respuesta» «debimos estar juntos» «soy una idiota» pienso mientras coloco mis manos en el agua y salgo de la cascada, aun con los ojos cerrados.

Siento que mi cuerpo se paraliza cuando siento unas manos recórreme los brazos poco a poco, se de quien se trata, y impedirlo era inútil, mi piel lo deseaba

—nunca te resististe a una alberca— la voz de James erizaba mi piel aun debajo del agua

No podía contestar, su mano en mi cintura me acerco a el, y sus labios llegaron a mi cuello, y moví cabeza para darle espacio y me giro bruscamente llevándome a la pequeña cascada de nuevo y besándome apasionadamente

Podía sentirlo, correspondía a cada beso, mis manos fueron a su cabello, salimos de la cascada y me levanto en sus caderas, enrede mis piernas en en... bese sus labios con necesidad, separe mis labios lentamente y lo vi a los ojos, nuestras miradas eran fijas nuestras miradas cruzadas hablaban por nosotros
Volví a besarlo, la pasión aumentaba mas y mas, James me tomo en ese lugar, solo éramos los dos, el tiempo se detuvo, nuestras almas volvían a ser una sola desde ese momento, podía sentir que estábamos hechos el uno por el otro, beso mi cuello una y otra vez mientras sus manos se aferraban a mi espalda y me hacia suya una y otra vez, lo abrace fuertemente cuando ambos llegamos al climax, y nunca antes me habia sentido tan amada

James

Seco su cabello con una toalla en mi habitacion, tengo tanto que decirle, pero todo era maravilloso en este momento, no queria arruinarlo

—Sam...— susurre a su oído, ella dijo

—shhh— me vio a los ojos y su mano volvió a mi mejilla, —no digas nada—

Volví a besarla, y la cargue hasta la cama, colocándola delicadamente

La bata la cubría poco, y yo me deleitaba con verla, nuestros labios volvieron a unirse, esta vez podía sentir cada caricia, mis manos se deslizaban sobre su piel, podía sentir como Sam se arqueaba de placer con mis besos en su cuerpo, ella era lo que mas amaba, y dejarla ir habia sido un error necesario.

Esa noche fue maravillosa, Samantha se coloco en mi pecho, despues de hacer el amor toda la noche.

Su cabello enredado en mis dedos y sus manos acariciaban mi pecho

—esto es perfecto— dijo por fin ella, asi rompiendo el hielo

—te necesito Sam— dije y ella me vio desde abajo su mirada iluminada y esa bella sonrisa preciosa que tanto amaba

Nos besamos de nuevo y dormimos abrazados toda la noche.