Encomendado「𝐼𝒟𝒪𝐿𝒾𝒮𝐻𝟩」

πρόλογο (𝓅𝓇𝑜́𝓁𝑜𝑔𝑜)

Salen de la capilla un grupo de jóvenes que han jurado dedicar su devoción al ser supremo,  privando se de todos los placeres que este mundo terrenal pueda ofrecer.

Son 20 las almas encomendadas al señor,  bueno,  19, por qué entre ellos resalta un cuerpo que es completamente diferente a los demás; físicamente es más alto ojos de color celestes que tientan el alma de cualquiera,  facciones  perfectas y finas,  un cuerpo estético,  piel blanca tersa como el durazno,  labios delgados pero apetecibles,  una abundante cabellera algo peculiar por su color plateado, su nombre Yuki Orikasa,  pero solo eso,  nadie sabía más de el por su carácter tan retraído y melancólico,  corrió a más de uno por tratar de establecer una conversación con él.

Pero ¿Por qué un ser qué puede provocar las más bajas pasiones se encomienda a un Dios y promete ser virtuoso aún sabiendo que es deseado por muchos  ¿Su devoción será real?

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FLASH BACK
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—No te preocupes,  ya no te molestaré más- dijo el delicioso joven a su abuelo

—Es que no te comprendo- golpea el escritorio- y se puede ser a donde vas  ir,  no tienes dinero ni nadie quién recurrir

—Ese no es tu asunto.  Prefiero la calle antes de estar un segundo más aquí

—¡Por qué te cuesta tanto trabajo adaptar te a la nobleza!

—¿¡Adaptarme!?  Dirás ACOSTARME con la nobleza

—¡NO SEAS VULGAR!

—Y cómo se le llama entonces al hecho de que ofrezca mis favores tanto a hombres como a mujeres que lo único que tienen es un buen apellido

—Se le llama ser di-plo-má-ti-co,  a veces uno tiene que hacer ciertos sacrificios para subir

—Ser un arribista- pronuncio el bicolor en tono ácido

—Llámalo como quieras,  pero el buen nombre uno se lo gana...  hijo ¡ya estamos en el siglo XVII.  Las cosas ya no son como antes,  ahora somos modernos y debemos adaptarnos a la sociedad que nos rodea

—¿Y la sociedad te incluye a tí?

—¿A qué te refieres?- cuestionó el octogenario bastante desconcertado

—Dices que debo dar placer placer a la sociedad para subir,  entonces cuando TU entraste a mi recámara la otra noche e intentaste propasar te ¿También debí pensar en la sociedad?

—Ese día yo no sabía lo que hacía,  tu sabes,  cuando uno tiene unas copas encima...

—Ese día y otros tantos en los que también intentaste hacer lo mismo

— ..... -

—Te despreció,  eres una basura,  que vergüenza que llevemos la misma sangre...  Y pensar que un día te quise

Dando por terminada la acalorada discusión el joven se dispuso a salir a la calle,  era de noche y hacía frío,  pero el no lo sentía,  porqué su corazón estaba llenó de irá y rencor.

Sólo llevaba unas monedas de oro en el bolsillo lo cuál le alcanzaron para pagar una posada por unos días pero el dinero se le acabó.

Vendió algunas joyas de traía puestas al momento de marcharse,  pero también se gastaron.

Era el mes de Noviembre y hacía frío,  ya no tenía dinero,  llevaba ya 2 días sin comer y decidió pasar la noche en un oscuro callejón.

Mala elección,  por que ese día hubo una de las más fuertes nevadas registradas en varios años en esa ciudad,  su cuerpo se cubrió completamente de nieve y no supo cuando cayó inconsciente...

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