Capítulo VIII.

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Querido Liam,

He estado pensando en abortar. ¿Es eso malo? Quiero decir, tú no has respondido y ya ha pasado un mes y dos semanas, y me estoy volviendo loca y apenas puedo respirar y estas en Irak y podrías estar muerto.

¿Estás muerto?

Espero que no. Todos esperan que no. Aunque ellos están perdiendo la esperanza, no es que tenían realmente una, pero aun así. Ellos saben que no estuviste respondiendo las cartas y solo piensan lo peor.

Es irónico como siempre era yo la cínica, era yo la que usualmente era negativa. Todo eso cambió desde que te fuiste, supongo, porque yo parezco ser la única creyendo que vas a volver. Incluso tu mamá está perdiendo esperanza, lo puedo ver en sus ojos. Ella se rehúsa a admitirlo, sin embargo, ella está tratando de mantenerse fuerte.

Sarah esta siempre en un rincón llorando y sollozando y es realmente molesto porque estoy tratando de no pensar en ti y ella hace eso jodidamente imposible y lo odio. Todo parece molestarme hoy, tal vez porque todo lo que está en este lugar es tuyo o nuestro o tú lo has tocado y odio eso. Y te odio.

Te odio por abandonarme y dejarme embarazada y tal vez por estar muerto y por hacerme depresiva y por causar todos estos pensamientos en mi cabeza y por dejarme lidiando con el desastre. Te odio demasiado por eso. Pero esa es la cosa, no puedo realmente odiarte, porque te amo mucho.

También te odio por eso; por hacerme el amor y después dejarme. Realmente quiero golpearte y patearte en las bolas así nunca podrías dejarme embarazada de nuevo y después irte y realmente quiero chocar mis labios con los tuyos y besarte y hacerte el amor al mismo tiempo.

Supongo que eso resume toda la segunda parte de la carta, eh?

Te extraño muchísimo.

Siempre tuya,

Polly.

Letters to Liam. (Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora