Capítulo 6: ¡Vamos!

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En la sala de un hospital con olor a cloro y todas las paredes pintadas de color blanco Jack Johnson se encontraba recostado en una de las camas rechinantes, no se movía por la reciente operación que le realizaron los doctores. Por otro lado, Aaron decidió contactar al otro Jack para verificar si logro localizar a Hayes -Gilinsky ¿Dónde estás-

-En la fiesta pero no encuentro a Hayes. Ya le pregunte a todo el mundo pero no la han visto-

-Sigue buscando, su hermano va matarnos-

-¿Cómo esta Jack?-

-Tuvo una ligera operación, esta mejor pero necesita descansar- 

-Cuídalo bien por favor, seguiré buscando- poco después colgó el teléfono.

En la mente de Carpenter vagaban varios mensajes de alerta, su mirada se notaba algo angustiada y no paraba de caminar de un lugar a otro. Planeaba llamar a la directora y contarle lo que estaba ocurriendo pero sentía que se envolverían en más problemas. Recordó a su padre, en las palabras que seguramente le escupiría en la cara, en la hielera donde lo encerraba por horas cuando cometía un error insignificante, en los gritos que suplicaban una salida, en todo aquello que rogaba porque no volviera ha ocurrir. 

Transcurrieron exactamente 3 horas cuando Jack despertó a causa de los sucesos que ocurrieron en la fiesta a la que asistió. Las uñas, probablemente garras, que sintió  en su vientre de ese chico ¿Qué era exactamente? No se puede simplemente fingir que no es un acto sobrenatural pero ahora tenia un poder a su favor, una nueva vida como brujo. Constantemente recurría a Gilinsky cuando enfrentaba un problema pero pronto cambiaría  eso, pretendía ser más auto-suficiente.

-Despertaste ¿Cómo te sientes?-

-Algo mareado pero nada fuera de lo común-

-Llamó el otro Jack, aun sigue buscando a Hayes-

Su semblante se torno preocupado, su cabeza divagaba en la posibilidad de que aquel chico de nombre Cris secuestrara a Hayes o algo peor -Tenemos que ayudar a encontrarlo, tiene que aparecer en algún lado-

-No puedes levantarte, tienes que descansar-

-No me importa-

-¿Qué ocurre? Luces como si lo fueran a matar-

-No estoy muy seguro pero el chico que me hizo esto creo que es un hombre lobo-

Aaron se quedo atónito con el rumor de su compañero -¿Cómo que un hombre lobo? ¿Estas seguro?-

-Si, sentí como encajaba sus garras en su estomago- 

-No estoy convencido ¿Existen los hombres lobo?-

-Créeme. Después de todo los brujos existen. Ana tiene que decirnos todas las criaturas que existen-

-¿Para qué? No serviría de nada, ademas no creo que se porte muy amable cuando sepa que desobedecimos- 

-No lo sabrá-

*****

Hayes despertó en una jaula algo extensa como para encerrar a un león. Se dedico a inspeccionar la zona de arriba a bajo, de izquierda a derecha pero solo encontraba libros viejos  y algunas cuantas plumas caras sin tinta. Opto por gritar varias veces hola pero no conseguía respuesta alguna. Se acomodo en el suelo para poder adivinar su localización con la ayuda de su poder, seguía en la gasolinera solo que debajo de ella. Poco después entro una mujer de piel morena, cabellera rubia y una actitud de diva empoderada. 

Se acerco hasta la jaula y le grito a la misma señora que le lanzo el hechizo a Hayes -¡Berta!-

-Dime Alisa- 

-Me puedes explicar que hace encerrado un chico en mi biblioteca-

-Es un brujo, se atrevió amenazarme. Es aprendiz de Ana-

-Interesante. Déjanos solos- inmediatamente Berta se marcho.

El chico se encontraba algo asustado por aquella mujer misteriosa -¿Que quieren de mi?-

-Solo hablar-

-¿Me encerraron solo para poder hablar? Vaya trato gentil pero me sentiría mas cómodo en un sillón-

-No puedo hacer eso por el protocolo, además amenazaste a mi compañera- comentó de forma tranquila.

-Ella se aprovecho de mí porque yo estaba ebrio, me lanzó un conjuro y me secuestro, esto es privación de la libertad-

-Puedes calmarte, no voy a dañarte. Solo quiero que me digas porque vagas ebrio a altas horas de la noche si eres un brujo joven e indefenso-

-Quería divertirme un rato, busque a mis amigos por todos lados pero no los encontré-

-¿Cuántos son?-

-Somos 12-

-¿12 alumnos? ¿Desde cuando?- quedo impresionada.

-Si. Empezamos hace poco, tiene menos de una semana- 

"Entonces ya comenzó" pensó -¿Cuál es tu poder?-

-Adivinación- 

Busco el libro más viejo, de color café oscuro con algunas telarañas sobre la portada y comenzó a leer. La tensión invadía la habitación al hacer cambios en su gesticulación cada vez que saltaba a otra pagina y cuando llego a la mitad tiro el libro asombrada. Salio de la habitación dejando al muchacho solo. Aquella rubia le ordeno a su compañera que liberara al chico con la condición de firmar un papel en blanco, le dio instrucciones de cerrar la tienda hasta nuevo aviso y se aventuro a un viaje rápido a los montes donde buscaría respuestas. 

Cansado y con algunas preguntas en su mente llego a la mansión, se dirigió a su habitación en silencio para que no lo cacharan. Vio la hora en el reloj de Mahogany, marca seis de la mañana. Se acostó en su cama para descansar sin importarle si sus compañeros aparecían.

El sol salia con sus rayos resplandecientes que atravesaban las ventanas de cada uno de los cuartos. La directora Ana toco en los cuartos para levantar a los jóvenes.

**Cuarto 1**

Matthew camino al baño para vestirse mientras Carter se despertaba con algo de flojera. Ambos se saludaron, sin embargo no mantenían una conversación larga  ya que conocían poco uno del otro. Por otra parte Carter piensa que Matt es tierno. 

-Voy a bajar, permiso-  dijo el castaño. 

-Dile a la señora Ana que bajo en un momento- 

-De acuerdo- cerro la puerta y se marcho.  

**Cuarto 2**

Shawn observaba la cama de Nash una y otra vez, no dejaba de sentirse culpable por hacerlo llorar pero Taylor y Cameron jugaron un papel importante para que intentara tal cosa. Quería perdonar a Cameron pero se sentía confundido en una mezcla de emociones de amor y enojo por el engaño. Deseaba creer en que él podía cambiar, no ser infiel y seguir con su relación bonita por mucho más tiempo pero temía que las cosas no se forjaran como el anhelaba. En cuanto a Taylor, buscaría la manera de librarse de él o en su defecto enfrentarlo y no tener miedo.

*****

Antes de colocarse en un asiento en la mesa Cameron, Taylor y Jacob notaron que sus compañeros no se encontraban en la academia. Cuando Ana acabo de servir el desayuno les pregunto si algo pasaba a lo cual respondieron que sus compañeros de habitación desaparecieron. Intentó llamar a su celulares pero no cogían la llamada. Llamó a Hayes, que se encontraba sentado en la mesa listo para comer y listo para no decir nada de la salida de noche,  le ordenó localizar a sus compañeros con su poder. Tomo una prenda de cada uno cerro sus ojos. Los tres permanecían en el hospital donde operaron a Johnson, le mintió a la directora informándole que los chicos descansaban en un hotel. Poco después advirtió a sus compañeros de lo sucedido con un mensaje y les pidió que regresaran a la academia.   



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