Una apuesta entre dioses, lleva a tres jóvenes a decidir sí la humanidad merece vivir o morir... Tres hombres, lairds de sus clanes, y lo mejor de lo mejor, escogidos por los mismos dioses, podrán acaso cambiar el destino que quieren para la tierra...
El día había llegado, se celebraría la boda en que se unieran las tres muchachas con los Lairds, y quien no, Ayleen estaba exultante!!
Moira y Alilsa no habían podido dormir bien, pues la noche anterior decidieron dormir juntas, como una especie de despedida, ya que por primera vez desde que tenían uso de razón, se iban a separar, y en las tres ya pesaba esa separación.
Platicaron de muchas cosas, ya que la cena fue muy callada y un tanto incomoda, Nuada era un muy buen anfitrión, ya que todo lo que sirvieron esa noche fue de lo más exquisito, los jóvenes al igual que ellas comieron y bebieron en silencio.
Cuando se fueron a sus cámaras, Ayleen y Moira sigilosamente se pasaron al aposento de Ailsa, la primera llevando una jarra de licor servido en la cena, y aunque había renuencia de Ailsa, esta terminó cediendo y bebieron, no una, ni dos, sino que tres jarras completas, el resultado… tres muchachas a punto de casarse y completamente borrachas.
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Sin duda tenían un fuerte lazo, y que lástima que lo descubrieron la noche antes de separarse, se comportaron como lo que eran, chicas… hablaron de todo y nada.
Ayleen era quien ponía la nota alegre!!
- Saben chicas… a mí si me gustaría probar lo que es tener sexo… y aquí entre nosotras, ya he visto a Craig completamente desnudo…. Y créanme… uuufff!!! Tiene un cueeerpooo!!! Sin contar que esta jijiji… muy bien proporcionado!! Las demás morían de risa al escuchar la revelación de Ayleen… y tú Moira… he visto al Laird Mackenzie… y la verdad es que es guapísimo!! Cuéntanos ay por favor!!
- Deja a Moira en paz, Ayleen… ella no es como tú… una inconsciente, desbocada… ya te hemos dicho que algún día esa curiosidad tuya te meterá en problemas, si tú ya has visto todo el paquete de “tu prometido” es cosa tuya, pero no quiere decir que Moira lo ha hecho.
- Pero ya lo hice… la vocecilla como un ratón de Moira apenas se dejó escuchar.
- Queeee???? Dijeron las dos hermanas al unísono.
- Emmm, si, ya lo vi desnudo… dijo la muchacha hecha un tomate, completamente ruborizada.
- Nooo!! Es en serio??? Cuéntanos… ay por los dioses!! Mírate tú!
- Si, la verdad, cuando lo traje aquí sin conocimiento, lo desnudé para que asearan su ropa…
- Y viste todo? Una irreconocible Ailsa preguntó curiosa…
- Ujum… todo.
- No nos dejes así Moira!! Cuéntanos con más detalle!!
Tapándose la cara con sus manos y muerta de la vergüenza, habló
- Es un dios!! Es divino!! No sabía que habían humanos tan atractivos… o será cosa de esta parte de la tierra... he leído que los highlanders, así se hacen llamar, son hombres en toda regla… y lo que vi, confirma lo leído… porque Eachann está dotado por todas partes, en especial su hombría, y al igual que Ayleen, me gustaría experimentar, que se siente y por qué tanto alboroto por el sexo.
- NO-LO-PUEDO-CREER!!! He escuchado a la siempre callada, pura y casta Moira hablar de sexo!!! Jajajajaja… debes estar supremamente borracha hermanita!!
- Y tu Ailsa… y no vayas a salir refunfuñando y huyendo de nosotras, ya hablamos las dos, te toca… déjame decirte que tu Duncan, es un gigante, guapísimo!! Te imaginas como será en su…
- Cállate Ayleen!! Bien saben que me llevan ventaja… yo… yo no he visto a Duncan tan íntimamente como ustedes a sus hombres, de hecho, les debo confesar que, aunque yo no lo he visto así, él… si me ha visto desnuda e inconsciente, de hecho él fue quien me desnudó.
Ailsa les contó acerca de su encuentro con Duncan, y tambaleante, sacó de su baúl la nota que él le dejó y se las mostró a sus hermanas, las dos leyeron las líneas escritas por el Laird McLeod, y Moira dijo
- Woow, Ailsa, y le crees? Bueno, es decir, crees que no se propasó contigo?
- Si, dijo la aludida, estoy segura que así fue, y me lo confirmó el hecho de no querer casarse conmigo por el respeto a su tratado con tú Mackenzie, eso habla que es un hombre de honor.
- Además de un estúpido, engreído… y no, no tengo la curiosidad de tener sexo con él, de hecho, yo si me concentraré en hacer lo que se ordenó y punto… así que a dormir… mañana será un largo día y ya casi está amaneciendo.
