Te amo, Lily Evans

Pánico en los mundiales

*Narra James*

-¡¡¡!MAMAAAAAAAAAÁ!!!! LLAMAN A LA PUERTA -grité para que me oyera, ya que yo estaba en la planta baja y ella en el segundo.

Si, seguramente estareis pensando "Si tu estas mas cerca de la puerta...porque no abres tu y le ahorras la molestia a tu madre?" Error. Porque estoy haciendo mi baúl a ultima hora, antes de que llegue Lily. Porque no tengo ganas de que me diga que soy un irresponsable y un vago. Por una vez, intento quedar bien delante de ella (aunque yo siempre quedo bien, claro)

-Oh James ya abro yo, no te preocupes tanto por mi. Y por favor chilla mas la proxima vez, creo aue hay unas 4 personas a unos 10 kilometros que no te han oido. -dijo mi madre sarcástica, bajando las escaleras.

Yo la ignoré y seguí ordenando mis cosas. Entonces oí el sonido de la puerta abriendose y a mi madre diciendo "¡Lily! Que alegria verte de nuevo! Pasa, pasa, James te está esperando" ¿Esperándola? ¿Yo? ¡Que va! ¡James Potter no espera a nadie! Bueno... a Lily Evans si. ¡Por Merlín! ¡El baúl! ¡Está aún a medio hacer! Pero ya era demasiado tarde, porque una chica peliroja entró al salón.

-Hola Potter-sonrió

-¡Lily! ¿No es muy pronto? -dije intentando, sin mucho éxito, tapar mi baúl

-No, habiamos quedado a las 10 y media, Ja...Potter -dijo Lily

-¡¿Me ibas a llamar James?! -me sorprendí. Le dediqué una sonrisa Merodeadora

-¡NO! ¡En tus sueños, Potter!

-Si, lo que tu digas peli -dije divertido y ella me lanzó una mirada furtiva. Sí que me iba a llamar James.

-¿Aún no estas listo? -dijo mi madre mirando un bulto de ropa junto a mi baúl. Gracias mamá, ahora seguro que Evans lo ha visto.-¿Que podría pensar Lily de ti? -Eso! Muy bien mamá, mete el dedo en la llaga.

-Ya casi acababa...-me defendí

-Si, acababas. Pero acababas de empezar. -dijo mi madre alzando la varita- Bauleo!

Entonces la ropa se separó, se plegó y se metió en el baúl. Luego dijo "baul locomotor" y el mio y el de Lily se colocaron uno al lado del otro encima de la mesa.

-Gracias señora Potter -le agradeció Lily

-No hay de que. -le dedicó una cálida sonrisa. Miró el reloj- Vamos retrasados por 10 minutos! Venga vamos, tocad la cuchara.

-La...cuchara? -preguntó Lily mirando la cuchara doblada y oxidada que tenia mi madre en su mano

-Si, es un traslador que nos han facilitado los del ministerio. -le expliqué

-Exacto. -dijo mi madre colocando la cuchara encima de los baules- Bueno, a la de 3 la tocais, de acuerdo? -asentimos- Bien. Una...dos...

-TRES!! -completé al mismo tiempo que tocabamos la cuchara.

*Narra Lily*

Noté como si un gancho me tomara por el ombligo arrastrándome por un tubo multicolor. Escuche una voz que decia "¡Soltaros!". No sabia muy bien como, pero hice un pequeño salto...y caí al suelo junto a Potter.

-Auu...-me qujé

-Yo no podria haberlo expresado mejor, peli -me dijo él, haciendo muecas de dolor al incorporarse

-Si, eso suele pasar las primeras veces. Luego ya le cojes el tranquillo a caer de pie -explicó mi madre- Levantaos, vamos. Aun queda camino por recorrer antes de llegar a nuestro destino.

La señora Potter empezó a andar a paso ligero hacia la espesura del bosque, y nosotros la seguimos, aunque varios metros por detrás.

Llevabamos un rato andando y hablabando de que equipo creiamos que ganaría el partido, cuando me caí en un charco de barro.