Sweet Romance:Capítulo 3

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Ruki pensó en su casa mientras conducía, bastante cómoda y ordenada, esperando que los otros miembros de la banda no la hubieran tratado demasiado mal mientras el no estaba, luego pensó en aquella chica de nuevo, el no tenía esa costumbre, pero aquella mujer lo intrigaba, no sabía que era lo que llamaba tanto su atención, sugería confianza sin resultar arrogante,se veía cansada o deprimida muy en el fondo,pero aún así se animaba un poco, dejó de pensar en ella al darse cuenta que estaba sonriendo ¿había estado sonriendo como un tonto todo el tiempo? Miró el diario y lo guardo con mucho cuidado en su mochila para no destrozarlo ni maltratarlo pero... ¿y por qué le importaba tanto? No tenía ni idea, pero el siempre había sido un tipo curioso, de pronto vio como en un taxi iba aquella chica, inmediatamente bajo del auto y tomó otro taxi, no quería que se viera sospechoso si lo veía siguiéndola en su carro.
-Siga a ese taxi!!
-Lo dirá de broma -exclamó el hombre.
-Nunca he hablado más en serio amigo -replicó Ruki antes de sacar el diario de su mochila.
Unos segundos después arrancaban a toda velocidad.
-Llevo toda mi vida esperando un momento como éste -dijo el taxista emocionado.
Ruki podía ver el taxi de la chica delante de ellos. Se había parado en un semáforo, pero en cualquier momento se pondría en verde...
Cuando el semáforo se puso verde, Tn cerró los ojos, pensando en que nada podía ir peor desde su llegada a Japón ya que se había dado cuenta que había perdido su diario y le preocupaba quien podría haberlo encontrado ya que no estaba segura si lo había perdido en el camino o quizá el vendedor de la casa lo tomó por equivocación, solo esperaba que nadie lo leyera, ahí guardaba sus preocupaciones y secretos en especial algo que no había hablado nunca, nunca, con nadie y había sido increíblemente liberador contarlo por fin, o escribirlo en éste caso.
Ruki y el taxista habían perdido el taxi de la chica de vista, a pesar de los valientes intentos del taxista, había
demasiado tráfico y demasiada lluvia como para poder seguir un coche. Ahora, mientras se deslizaba por las húmedas calles de Japón en dirección a su casa, el diario estaba a su lado en el asiento,por la curiosidad de saber si de verdad era un diario, había leído lo suficiente como para confirmarlo, era un diario personal, privado, una mezcla de pensamientos y detalles sobre muchas cosas, había leído lo duró que trabajo para poder tener ese cuerpo y ahora entendía por que la chica estaba tan en forma. Una narración en especial llamó su atención, era interesante y un recuerdo feliz, relataba su primer viaje, visitó un bosque y unas montañas en otro país, lo hizo sonreír de ternura al darse cuenta de que había empezado escribiéndolo con pluma negra, pero debía de haberla perdido a mitad del camino por que seguía primero en pluma negra y luego en pluma roja, Ruki pasó unas cuantas páginas y descubrió muchas fotos de paisajes hermosos de aquel lugar que visito aquella chica, frustrado al no saber cuando podría devolver el diario que parecía ser importante para la chica volvió a cerrarlo y decidió que no iba a leer más, pues, lo último que necesitaba era curiosear el diario íntimo de una desconocida, una vez decidido guardó el diario en la mochila y volvió a mirar por la ventanilla, ya casi había llegado a casa.

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