Supernatural: Un Amor Angelical.

Capítulo 16: Por Ellos.

Escuchaba las voces de Sam, Dean y Castiel bastante lejanas, aunque estaba convencida de que estaban de lo más cerca; en el Impala de camino al búnker, seguramente. Se sentía tan aturdida, ni siquiera recordaba lo que había pasado, lo tenía todo borroso. Sentía un terrible dolor de cabeza en aquel momento, el ángel la abrazaba contra su pecho.

¿Qué había pasado?

Después de tantas insistencias, Victoria consiguió ir a un caso con Sam, Dean y Castiel. Estaba cansada de estar encerrada en el búnker y, cuando sus primos mencionaron el caso, no dudó en decir que quería ir; a Cas no le pareció o, al menos, no del todo, con Aiden aun encadenado a Vic, resultaba más peligroso porque en algún momento el semi-caído aprovecharía la situación para tomar control sobre ella.

Y eso fue exactamente lo que pasó.

Cuando por fin llegaron al búnker, Victoria cayó inconsciente en los brazos de Castiel. Una hora y media después despertó en su habitación, recostada en su cama. Se levantó quedando sentada en la cama con cuidado. Dio un suspiro preguntándose qué había pasado, todo lo tenía borroso, muy borroso.

-Despertaste -dijo el ojiazul entrando en la habitación.

Victoria sólo asintió mientras el ángel se acercaba a ella y se sentaba en el borde de la cama.

-¿Qué... fue lo que pasó? -preguntó la nefilim con voz ligeramente temblorosa, le aterraba saber pero de igual manera lo necesitaba.

Castiel suspiró:

-Aiden tomó control sobre ti...

La castaña ya se había imaginado algo así, pero faltaba saber si el semi caído había causado algún daño.

-¿Hice...?

-No fue nada grave -la interrumpió Cas adivinando lo que preguntaría -, no alcanzaste a Sam o a Dean, sólo a mí. Pero fueron unos cuantos rasguños con la espada ángel.

Victoria suspiró bajando la mirada.

-Tranquila, ya pasó todo, estoy bien -le dijo el ángel brindándole una corta sonrisa.

Vic asintió lentamente, algo insegura.

-Sam y Dean fueron a terminar el caso, estarán de vuelta en unos días -dijo Castiel.

La nefilim asintió.

-Estaré en la biblioteca, descansa un poco -dijo el ángel poniéndose de pie y saliendo de la habitación después.

Victoria se volvió a recostar acurrucándose en la cama y dio un suspiro.

Aiden tomó por un buen rato control sobre ella durante el caso y ni siquiera podía recordar cómo había sido.

Sentía una gran presión sobre sí misma, quería intentar recordar lo sucedido pero no podía, lo tenía todo borroso. Hasta que por fin armó su rompecabezas: antes de estar en el Impala, recordó haber estado sola en la habitación del motel donde se hospedarían el tiempo que durara el caso, iban a hacer una investigación de campo, se había estado preparando hasta que un fuerte dolor de cabeza la invadió. Después, todo fue negro.

La nefilim suspiró nuevamente, así había sido todo.

Algo les quedaba claro a los Winchester y a Castiel: después de tomar por primera vez control sobre Victoria, Aiden claramente ya no planeaba simplemente jugar.

Al poco rato, Victoria cayó dormida.

Un estruendo repentino la despertó, se sentó en la cama. Sentía una energía fuerte en el aire, una presencia altibaja.