F A N || 2min

CAPITULO 15

Taemin alargó un largo quejido cuando notó que Jong In no estaba ni cerca de ponerle atención esa mañana cuando lo visitó a su casa. Odiaba la idea de no tener nada que hacer, sin trabajo ni responsabilidades en la universidad más que entregarle las tareas a su amigo para enviarlas, Taemin no tenía absolutamente nada que hacer.

Un universitario promedio deseaba esos días de desidia, Taemin los aborrecía.

Había visto ya tres películas que lo decepcionaron, después intentó ver una serie, pero terminó frustrado cuando se dio cuenta que estaba en emisión. Finalmente se resigno por ver videos y programas repetidos donde aparecía Kim Jong Hyun, y precisamente por esa razón es que estaba ahí esa mañana molestando a su amigo en un café.

Según su recapitulación de los años 2012 y 2013, Kim Jong Hyun estaba soltero, feliz y estaba, sobre todo, activo con las promociones de un álbum, pero cuando llegó al 2014 Taemin recordó los amargos días de corajes y bilis atorada en su garganta.

— Te estoy haciendo preguntas. — Reclama ya lo suficientemente cansado de no tener respuestas. Jong In no despega la vista de su computadora.

— Y yo te estoy ignorando. — Una respuesta corta y poco efectiva pues Taemin se pone de pie y avanza hasta estar a su lado, tomar la laptop y cerrar su tapa.

Las llamas en los ojos de Jong In se desatan, pero extrañamente esa mañana Taemin es necio y decidido, o muy estúpido.

— ¿En que momento Kim Jong Hyun conoció a ese chico?

— Esa pregunta me la haces desde que salieron las noticias de su noviazgo.

— Sí, y nunca me la respondes.

— Porque n-o-l-o-s-é, genio. — Jong In se da el lujo de deletrear su respuesta. Está harto, más molesto que harto, de que su amigo siga sacando ese tema cuando todo mundo en su familia parece querer enterrarlo.

Su mal humor casi brota cual agua cuando Taemin se acerca y se sienta con él en su silla, no importando el espacio personal de su amigo.

Jong In es muy listo, una de las personas más listas que Taemin conoce y posiblemente conocerá en su vida. Su amigo es lo suficientemente listo como para saber que si no lo detiene en ese momento con crueldad, Taemin seguirá sacando ese tema aun cuando sea su funeral.

Y no solo es Taemin quien lo hace, ha tenido que soportar esas preguntas desde que las noticias explotaron un fin de semana del lejano 2014. Aun recuerda lo furioso que se había puesto Minho y las largas que sus molestos amigos le estuvieron haciendo.

Sobre todo, recuerda que el brote enfermizo de amor casi había terminado con el asqueroso amigo de Minho pegado a su hermana.

— No sé en que momento se conocieron, pero sí donde lo hicieron. — La cara de Minho se apareció en su mente. Darle esa poderosa información a Taemin, también podría significar destruirle a su primo su intento por robar a Taemin de su lado.

Una sonrisa en sus labios acrecentó la expectativa de Taemin quien esperaba impaciente a su lado, sin embargo, en el momento en que Jong In comenzaba a abrir la boca para destapar el pasado tormentoso de Jong Hyun, Taemin se puso de pie como resorte y lo ignoró.

El chico de enderezo en su asiento y regresó la vista para ver que era lo que su amigo había encontrado más interesante que la información confidencial que le estaba por dar, y, con asombro, él también se puso de pie.

En una de las mesas del café pudo ver como Bae Irene se acomodaba el cabello en una coleta bien peinada. Estaba sentada con un chico que extrañamente le parecía conocido.