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Jin había bajado del taxi fuera de la nueva tienda de trajes, que estaba para su sorpresa, totalmente llena de periodistas y chicas con ¿pancartas?

Pasó por la gente y llegó a una zona donde estaba lleno de omegas, betas y alfas perfectamente vestidos con trajes y maquillaje. Al parecer había subestimado el estreno de la tienda, aquello parecía desfile, en medio de espejos amplios y luces que parecían iluminar hasta el más mínimo rincón.

—¿Por qué no estás listo chico?—una chica bajita lo miro hacia arriba con algo de molestia y antes de responder ya estaba sentado siendo maquillado sin posibilidad de protestar. Otra chica apareció en escena con un traje rosa con terminaciones de cadenas en las mangas y botones que parecían de ¿oro? ¡El no podía usar eso!

—Oye yo no soy mod-la chica lo miro y sonrió, haciéndolo callar.

—Estas muy guapo, irás al frente, ponte esto rápido y salen todos a escena. Recuerda, no puedes mirar a los jefes o hablarles durante la conferencia, el se pondría aún más nervioso con más y más gente y.... no queremos que rompa algo ¿entiendes?—Jin asintió—Ten esto y mañana te verás en cada revista local, nos vemos ¿tu nombre?

—Seokjin.

—Suerte Seokjin— La chica salió y Jin miró el traje con algo de duda ¿estaría bien hacerse pasar por modelo?... no esperaba dinero pero quería verse bien... ni modo.

Sus planes se borraron totalmente cuando apenas salió dirigiendo la fila de modelos igual o más guapos que él, la pantalla se movió y quedó expuesto ante muchas luces de cámaras que parecían querer encandilarlo, tal como había visto muchas veces, empezó a caminar y se posicionó en el final de la fila establecida con anterioridad.

Lo había hecho bien. Nadie parecía notar que no era del mundo del modelaje, sino al contrario,muchas chicas las sentía murmurar preguntando como ubicarlo para trabajos y tener cosas de él. Un sonrojo apareció por la extraña atención que estaba recibiendo pero este aumento aún más por la sorpresa de ver llegar a los dueños desde la pasarela donde había pasado.

Una chica de piel tostada y muchas curvas envidiables apareció con un vestido largo que parecían estilizarla aún más y un cabello largo y sedoso que parecía irreal.

Hasta ahí aún podía mantener la cordura.

Pero detrás de ella apareció su foco de atención que hizo que no pidiera quitar la mirada de encima, pese a la petición de la chica.

Era el amigo de Jimin que le había mostrado con anterioridad desde su teléfono, ahora rubio, con un impecable traje blanco que parecía resaltar aún más su estatura, y en sus poderosas manos sostenía una especie de bastón con terminación dorada que hacía que su mente divagara lejos mientras ellos daban pasó a presentar la colección y estreno de la tienda.

Por desgracia no notaba que las cámaras profesionales y de las chicas también estaban enfocadas en él mientras miraba sin descanso al moreno de traje blanco, sin poner atención al sonrojo que tenía por mirarlo.





No, no soy modelo|NamJin|+|YoonJinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora