Capitulo 3

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Cuando los rayos del sol tocaron su rostro, comenzó a fruncir el ceño mientras, se giraba un poco para apartar la luz de su rostro. No quería levantarse, se sentía cansada y solo quería dormir, pero se despertó completamente cuando escucho gemidos angustiosos a su lado

Abriendo los ojos fijo su vista en naraku, quien parecía que estaba a punto de llorar. Sabiendo lo que le pasaba lo acerco a ella con un brazo, eh inmediatamente se sentó, mientras abría la parte superior de su kimono para exponer sus senos, el cual naraku inmediatamente al ver la acción se animó, y comenzó a moverse con más fuerza, al ver que ya podría comer

Sonriendo divertida, lo pego a su pecho y el comenzó a beber de su pecho. Esperaría a que el terminara de comer para comenzar a caminar una vez más. Mirando el cielo calculo la hora. Apenas debieron de haber pasado una o dos horas desde que el sol debió de salir, aún estaba a tiempo para comenzar a caminar. Iría por las bayas primero y luego se prepararía para su larga caminata

Estaba comenzando a quedarse dormida nuevamente, hasta que sintió como naraku tomaba su kimono entre sus manos y lo jalaba ligeramente, haciendo que despertara. Sonriéndole con cansancio lo dejo en la manta, mientras se levantaba y comenzaba a estirarse para despertarse

"recogeré unas bayas y comenzaremos nuestra larga caminata, así que espera un poco"

Le dijo mientras le daba una sonrisa y comenzaba a caminar al arbusto lleno de bayas, con un pedazo de tela que había encontrado en el fondo de la mochila. Comió unas en ese momento y las demás las puso en el pedazo de tela, el cual la hizo una pequeña bolsa para poder llevar la comida. Sonriendo regreso a su pequeño campamento y comenzó a guardar las cosas mientras

Acomodo la mochila en su espalda, y tomo a naraku en sus brazos. Una vez lista, miro el bosque y sin más, comenzó a caminar. Esta vez, tomaría breves descansos y le daría de comer a naraku mientras caminaba, así que no perdería mucho tiempo. Sería algo incómodo, pero estaría bien

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No, no estaba nada bien. Desde que se había levantado esa misma mañana, no se había detenido para descansar, amamanto a naraku unas tres veces, mientras caminaba, y para que nadie se diera cuenta uso el kimono que cubría a naraku, sobre su hombro, al mismo tiempo que cubría a naraku para que nadie viera, pero al parecer eso atraía la visa de la gente, porque en cuanto unas mujeres pasaron a su lado, rieron con disimulo antes de alejarse de ella. Si, se habían dado cuenta, que vergüenza

Sintió como un gran sonrojo cubría su cara al recordar lo de unas horas antes. Ahora cuando le diera de comer a naraku lo haría en los bosques mientras caminaba, era lo mejor. Haciendo una mueca al sentir una punzada de dolor en sus pies, miro el cielo y se asustó un poco. Ya era medio día, sango y los demás ya deberían estar llegando a la aldea de kaede. Sabía que en cuanto anocheciera ella entraría más en pánico porque inuyasha llegaría a esa hora

Naraku sintió inmediatamente la agitación y el miedo que kagome desprendía, así que hizo lo mejor que podía hacer en ese momento para distraerla... comenzó a llorar

Inmediatamente al escuchar su llanto kagome entro en acción olvidado sus anteriores temores para calmar a naraku. Lo abrazo un poco más mientras lo mecía un suavemente y tatareaba una canción de cuna. Estaba agradecida por su llanto, si él no hubiera llorado, estaba segura que ella estaría en pánico en ese momento

"gracias"

Como si el entendiera sus palabras, paro de llorar y le sonrió mientras reía ligeramente haciendo que ella se calmara aún más. Tomando aire, reanudo su caminata, seguirá durante un tiempo más y luego tomaría un merecido descanso

Segunda oportunidadWhere stories live. Discover now