Los Reyes Oscuros / ZoRo (Zoro x Robin)

Te aniquilare

-Bien... estamos aquí.- Luffy se posiciona frente a la enorme montaña que tenían enfrente

-Robin chan se encuentra en ese lugar.- Sanji se coloca a lado izquierdo de su capitán

-Si, la hora llegó.- Zoro a lado derecho

Todos los Sombrero de Paja se reúnen alrededor. 

-Zoro... ¿Aún quieres ser tú el que patee el trasero de Shin.- Pregunta el pelinegro

-Pues claro que si.- Responde el peliverde

-Shishishi, de acuerdo, entonces nosotros te abriremos el paso... tu tendrás que impedir esa boda ¿de acuerdo?

-Claro que si

-Marimo, si no logras salvar a Robin chan te mataré 

-Has lo que quieras, si no logro rescatarla tu dejarás de ser pervertido

-Heh

-Chicos...- Nami murmura al ver a sus compañeros de esa manera tan tenaz 

-¿Todos escucharon? ¡fue una orden para todos, hay que abrirle el paso a Zoro!+

-¡Si!- Exclaman todos al unísono 

Tras esto, la tripulación camina con toda la convicción hacia la enorme fortaleza.

Mientras tanto...

-El jefe no quiere que nadie interrumpa, se ha ido hasta el fondo junto con Nico Robin y el oráculo encargado de casarlos.- Habla el gordo 

-Kahahaha, parece que el jefe está emocionado 

-Si, lo está

-Tsk, si todo sale bien los Akumayin lograremos ser lo que era antes... es genial

-No hay que cantar victoria, aún está Sombrero de Paja

-El jefe se encargará de eso, tu tranquilo

Los seis sujetos que al parecer eran los más poderosos luego de su jefe se encontraban sentados en la sala de estar de siempre, esperando a que lo que pasara tuviera que pasar.

Mientras, en diversas partes del lugar se encontraban varios otros sujetos vestidos de manera similar, sin embargo no se veían tan poderosos. 

Shin estaba preparado para todo.

Y hablando de Shin...

Unos pisos más abajo. 

Shin se encontraba vestido de manera diferente a como se mostró siempre, usaba una larga gabardina de colores blanco, rojo y negro, encima de esta llevaba una enorme bufanda de color plateada con dorado y un kimono abierto color negro con bordados de figuras extrañas. 

Se encontraba de pie a lado de un extraño sujeto de avanzada edad que cubría su rostro con una capucha color café, mientras que en sus manos llevaba una esfera de cristal y un bastón con una extraña figura de una criatura con alas.

-Falta poco, mi señor Shin

-Así es... ven pronto a tu muerte, Nico Robin

En una habitación del mismo lugar se encontraba Robin, llevaba un largo vestido blanco junto con una larga bufanda roja que se enredaba entre sus brazos, llevaba el cabello peinado con una coleta hacia atrás dejando caer dos mechones gruesos en ambos extremos de su rostro, además llevaba maquillaje, se le veía apática y triste por cierto.

La pelinegra suspira mientras sigue siendo arreglada por un ser encorvado y feo. 

-Aquí vamos.- Murmura la pelinegra ya rendida y aceptando lo que le esperaba, una vida con un hombre extraño, teniendo que dejar el barco y solo tener la oportunidad de visitar a los que consideraba su familia.- Creo que... nunca debí intentar enamorar a Zoro, de no ser por eso quizás... las cosas hubieran sido diferentes