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Definitivamente no esperaba acabar una salida tranquila con sus amigos en un hospital, preocupado por un desconocido. Los médicos le felicitaron por haber cuidado bien del joven, quien luego de decir en un hilo de voz su nombre, volvió a perder la consciencia.

Estaba en la sala de espera, tenso como nunca y con la vista fija en la puerta donde se encontraba el tal Jeonghan.

- Shua, ¿Qué tal esta? – Aparecieron sus amigos muy preocupados por un pasillo, rodeando al americano.

- Nose, aun no salen los doctores, pero perdió la consciencia de nuevo – Conto desanimado.

- Hey, puede que hayas salvado una vida, asi que anímate – Le dijo Vernon con optimismo, dándole amistosas palmadas en el hombro.

- A mi casi me da un ataque cuando apareciste cargando a una persona – Dramatizo Seungkwan, también turnándose en mirar a su amigo y la puerta a la que este miraba.

Todos se sumieron en un largo y pesado silencio, tratando de procesar lo que paso en la playa y que acabaran en un hospital.

Cuando una doctora salió de esa habitación, se sintió incomoda por todos los ojos que se clavaron en ella – ¿Todos ustedes vienen con este joven? – Cuestiono con seriedad.

- Nosotros fuimos quienes lo encontramos en la playa y llamamos a la ambulancia – Explico Minghao con calma – Pero no lo conocemos – Añadió al final. La medico asintió y suspiro desanimada.

- ¿Conocen a un tal "Joshua"? – Pregunto por si acaso la mujer de unos treinta. Todos se quedaron quietos por la sorpresa.

- ¿Por? – Cuestiono con extrañeza Vernon, mirando de reojo al americano que parecía haberse quedado congelado.

- El paciente despertó en cuanto lo dejamos en la camilla, pero nos centramos en hidratarlo, ver si tenia heridas y limpiarlo de toda esa agua marina y arena. El tema es, que en todo momento solo decía ese nombre – Explico en un tono neutro la mujer.

- Y-Yo me llamo Joshua – Hablo al fin el castaño, quien se veía igual de confuso que todos – Pero no lo conozco, así que no entiendo porque... - La rubia al fin pudo soltar un suspiro de alivio.

- Puede ser que haya escuchado tu nombre estando en un estado de seminconsciencia, pero, aun así, ¿Podrías probar a hablarle? Quizás se sienta más cómodo contigo que con un médico, pues a nosotros no nos ha dicho nada aparte de tu nombre – Asintió dudoso.

- Si quieres te esperamos – Jisoo trato de respirar un par de veces para calmarse, para luego revolverle el cabello a Hansol con cariño.

- No se preocupen, vuelvan a casa, a diferencia de ustedes, yo ya tengo todos mis trabajos y tareas listas. Les informare de cualquier cosa – Les dio una relajada sonrisa a cada uno, quienes se despidieron para ya irse algo indecisos de dejar a su amigo solo con un desconocido.

- Menos mal estabas ahí con tus amigos y lo encontraron – La mujer le hizo una seña para que la acompañara a la puerta que daba a la habitación de Jeonghan – Soy la doctora Ailee y seré la encargada de este niño, así que cualquier duda o información que consigas de él, contáctame. Un practicante vendrá en un rato a revisar que todo este correcto porque tengo cosas que hacer – Indico amablemente, abriendo ya la puerta para dejarle pasar.

- Muchas gracias, doctora – Termino la conversación entrando y escuchando la puerta cerrarse tras él.

Nervioso, vio al joven de la camilla. Se encontraba recostado con los ojos cerrados y respirando pausadamente. Ahora que estaba limpio y recuperando el color de su piel, se dio cuenta de lo hermoso que era, luciendo como un ángel en medio de lo blanco del hospital. Casi pensó que estaba dormido, pero cuando dio un paso en su dirección, este abrió sus ojos con lentitud, dejando ver sus adorables ojos color avellana.

Morpheus' brother (JIHAN)Onde histórias criam vida. Descubra agora