capítulo 20

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Dos días más habían pasado, dos días de agonía y desesperación por la fiebre tan alta de Lucía. Por suerte, la fiebre había disminuido gracias al baño que le dio Oana. Pero aún así, la tenía lo suficientemente alta como para tenerla inconsciente.
La rumana se pasó esos dos días cuidando de ella. No dormía apenas, más bien, nada.
Tom no salía tampoco de la habitación . Ambos tuvieron tiempo de hablar de todo. Todo de lo que tenían en común. Todo de la guerra. Se sintieron cómplices, amigos de armas, aunque las circunstancias eran distintas, ambos habían visto demasiado. Se sentían identificados. Empatizaban el uno con el otro.
Oana se abrió a él, contándole sobre su aborto, contándole sobre ese soldado al cual sentía algo especial. Le contó todo lo que vio, lo que aprendió.
Tom también hizo lo mismo, pero de años antes, por el tiempo en el que fue llamado.
También le habló de su hermana fallecida y lo de Kellos. También sintieron conexión por eso. Y era algo lógico. Oana, había pasado demasiado. Le comentó también sobre su error nada más llegar al delicatae. Era de lo único que se arrepentía. Tom intentó convencerla de que de los errores se aprende y que se ha ganado a pulso la aceptación de todas las chicas y su perdón. Aunque la rumana lo sabía, aún se sentía mal consigo misma, era como si no pudiese superarlo. Cómo si necesitara más ...
Se levantó para poder asearse y los dejó solos. Tom le iba pasando paños húmedos y fríos por la frente y cuello. En un momento determinado, se fue hacia la ventana y se puso a mirar los pocos rayos de sol que el tiempo quería entregarles a los londinenses.

Poco a poco y con el cuerpo demasiado agotado y sin saber porqué, Lucía empezó abrir los ojos. Sentía picor, dolor, tenía ganas de toser. Sentía que no hubiera dormido durante semanas! Que le pasaba?
Abrió del todo sus ojos y se encontró en una habitación que le resultaba familiar, pero no era la suya y Tom, era un dormitorio del delicatae. Que hacia allí?
Empezó a buscar con la mirada y lo vio. Allí parado mirando por la ventana. Tenía la camisa fuera del pantalón, no llevaba el chaleco ni la americana. - T_tom?...

Tom agrandó los ojos y se giró rápidamente - Lucía - corrió hacia la cama y besó su mano, tocó su frente, la inspeccionó meticulosamente - por dios - apoyó su cabeza en la cama - no sabes la agonía que pasé

Lucía no entendía nada. Que hacia allí? Pero si ella estaba con la reina hablando - Tom ... Qué ha pasado?

Tom la miró y sonrió - te desmayaste en palacio. Estuviste dos días allí. No sabíamos que te ocurría. Mi madre fue a buscar a Juliette, Oana pidió traerte y has estado dos días más inconsciente

- pe_pero por qué?

- un virus. El sarampión. Sabes lo que es?

La española frunció el ceño sin entender nada. Un virus que la dejó cuatro días inconsciente? Pues sí que era fuerte ese virus. La puerta se abrió dejando paso a la rumana que sonrió al verla despierta - vaya susto nos has dado enana - se acercó a la cama y tocó su frente - la fiebre va bajando. Se está pasando ya - la miró sonriente - en unos días habrá pasado todo

Lucía la contempló, estaba pálida, con ojeras. Se fijó en su pelo que estaba húmedo, seguramente se había dado un baño. Llevaría esos dos días sin dormir?
Miró a Tom. Él estaba peor que ella! Llevaba barba, estaba algo despeinado y sus ojeras parecían dos morados que ocupaban lo bajo de sus ojos - no habéis dormido?

- teníamos que estar pendientes. Somos pocos que entendemos de este virus - contestaba Tom algo más tranquilo al verla despierta

Lucía hizo mueca - ir a descansar. Yo estoy bien. Y tengo que volver ha quedar con la reina, la conversación...

- olvídate de eso Lucía - besó de nuevo su mano el duque - ahora tienes que acabar de recuperarte. Estas muy débil

- si, aunque sea un virus que luego se va, puede dañarte. Puede dejarte débil toda la vida. Puedes estar enferma siempre si no te cuidas. Y tú, quieres hijos, no?

DELICATAE ( las chicas de madame Juliette)(t4) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora