答￤»Tu me enseñaste que tengo razones para amarme a mi misma.«
Zoella Stark era una joven alegre que parecia tenerlo todo, pero en realidad le faltaba lo mas importante: Amor propio. Al llegar a Hogwarts conoce a muchas personas que le hacen bien...
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𝐖𝐈𝐒𝐇 𝐈 𝐇𝐀𝐃 𝐄𝐗𝐏𝐄𝐂𝐓𝐀𝐓𝐈𝐎𝐍𝐒
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SEPTIEMBRE LLEGÓ MUCHO MÁS RÁPIDO DE LO QUE ZOELLA PENSÓ. ESTABA A PUNTO DE IRSE DE SU CASA A UN INTERNADO DESCONOCIDO. Tan solo por un momento creyó que convencer a su madre sería tarea difícil, pero a decir verdad, no fue así. Fue una llamada corta, de tan solo 3 minutos en que rápidamente le explicó cómo es que era bruja y que iría a un internado, a la cual su madre contesto "Ya sabes dónde está el dinero, si necesitas más, llámame" para luego colgar.
Aunque nunca lo admitiría esa falta de interés por parte de su madre, siempre le dolería, por más que lo negará.
Toda su vida se baso en estar lo mas escondida posible, era independiente de su madre -De alguna extraña manera, puesto que ella le proporcionaba dinero- pero apesar de todo, mantenía sus calificaciones altas y no se quejaba mucho.
Tomo su baúl, su mochila, dejo una nota de despedida a su madre y emprendió su viaje hacia Kings Cross
🌻
—Maldita sea, creo que si era una broma— Pensó en voz alta, ya que no había podido encontrar el vagón que la llevaría a su destino. Tomo el gran baúl pero al tratar de girarlo choco con algo.
—Ten más cuidado—exclamó una voz un masculina. Al voltear se dio cuenta que esa voz le pertenecía al mismo chico de gafas el que acompañaba a Dumbledore la vez anterior.
»Oh por dios! Mi salvador «. Pensó la pelinegra.
—¡Me alegro de encontrarte! Pensé que todo era falso, estaba a nada de irme a casa. ¿Donde es el andén que venía en la carta? Llevo horas tratando de encontrarlo. — Exclamó tan rápidamente que algunas palabras salían entrecortadas.
—Esta justo por ahí—Señaló el muro de frente justamente entre el andén 9 y el 10.
El muchacho al voltear a verla de nuevo quedó completamente pasmado por la belleza de la chica. En su primer encuentro no pudo apreciarla a la perfección, pero esta vez era diferente. Se sorprendió cuando miro aquellos dos zafiros de diferente color y las pequeñas pecas que cubrían su rostro.
—¿Me estás jodiendo verdad?. No puede ser posible, esta un puto muro. — Dijo irónicamente la morena, sacando de sus pensamientos al elegido.
—Esta encantado. Puedes traspasarlo junto con el baúl.- — señalo Potter
Ella tan solo asintió un tanto insegura para pasar el muro
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Cuando entro al vagón perdió por completo de vista al chico de lentes. Estaba un poco decepcionada puesto que quería conocerlo mejor, tal vez hacerse su amiga, pero, pareciera que el muchacho le desagrada ella.
