Desentrañando el misterio

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Petunia y Calipso, después de esa desagradable sorpresa y el que hayan jurado venganza contra el que le había hecho eso a Petunia, se sentaron en el sillón. Calipso recorrió con la vista la sala y sus ojos se toparon con los bebés, estos jugaban tranquilamente con unos peluches. Parecían estar llevándose muy bien pues ambos se mostraban emocionados.

—¡Wow!, no mentías con eso de los niños—dijo Calipso sorprendida. Petunia negó con la cabeza.

—Claro que no— Tomó el pequeño juguete de madera donde había puesto la runa. Dejo el juguete de lado y tomó a Dudley entre sus brazos.

—Él es Dudley Dursley—Calipso hizo una mueca ante tal apellido—Lo sé, lo sé. Cambiaré su apellido, pero mientras tanto te lo presentó así— Calipso sujeto al pequeño Dudley que la veía con ojos curiosos. Petunia tomo a Harry en brazos y dijo:

—Él es Harry Potter, al parecer mi sobrino—Petunia pausó un momento haciendo una mueca de auténtica tristeza-—Me dieron una carta diciéndome que mi hermana, Lily, ha muerto...

Calipso se acercó en un incómodo abrazo a Petunia, pues ambas aún sujetaban a los niños, y trato de consolarla lo más que pudo.

—Cariño, no sabemos si es en verdad esto—dijo Calipso—ya sabes los casos en los que he estado involucrada...

Petunia vaya que sabía, no por nada Calipso era una de las personas más ricas e influyentes de Gran Bretaña tanto muggle como mágica. Petunia aún se asombraba por la extraña historia de su amistad. Bueno no la historia en sí, si no que Petunia jamás se imaginó tener a alguien (como amiga) con ese poder en las manos. Claramente no porque Petunia fuera interesada, al contrario. Petunia creía que el trabajo duro y hecho por ella misma valía mil veces más que si te ganabas la lotería.

-—Tienes razón— Fue la confirmación escueta que dio Petunia sin querer darse falsas esperanzas. -—Pero para confirmar algo tendremos con hablar que la morsa está—dijo Petunia mirando con asco a la esquina donde el guardaespaldas de Calipso había atado a Vernon a una silla.

—De acuerdo—Calipso se movió para dejar a Dudley en el corral, al igual que Petunia quien dejó a Harry. Ambos bebés continuaron jugando, y sacándole el relleno a uno de los deshilachados peluches.

El guardaespaldas para sorpresa de Petunia saco una varita.

—Espera un momento-Petunia se dirigió a Calipso—¿Tu guardaespaldas es un mago? -—le preguntó.

Calipso rodó los ojos.

—Claro que no, solo planea encajarle el palito de madera a Vernon en los ojos—Respondió con sarcasmo —¡Pues claro que si, mujer! ¡Concéntrate! —

Petunia ni se inmutó conociendo el humor de Calipso, que tanto había extrañado, en cambio solo se rio y levantó las manos en son de paz.

—Petunia debe de estar muy mal si hasta extrañaba mi humor como para no contestarme—pensó Calipso con tristeza y amargura por su amiga.

Le hizo una seña a el mago en la sala para que despertara a Vernon y este con un enervate despertó sobresaltado. Y cuando vio a Calipso se exaltó con enojo.

—¡Tú! Ese maldito viejo chiflado me lo advirtió—Exclamó Vernon con odio y aberración—Me advirtió que podrías venir algún día por mi mujer.

Petunia y Calipso estaban con caras inmutables, pero muy confundidas por lo que salía de la boca de aquel sucio hombre

Petunia fue la primera en reaccionar y dijo:

-—En primera, yo no soy tu mujer— Dijo con asco—no tengo ni idea del porqué nos casamos, así que no cuenta. En segunda ¿De quién rayos estás hablando?

La magia de Petunia (Hiatus Iniciado En Septiembre 2021)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora