Rooftop|| Dodam [TREASURE]

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El joven echó a correr en cuanto lo vio a él en el tejado de la escuela, ¿nadie se daba cuenta?

Afortunadamente, llegó a tiempo.

-¿Qué haces?-preguntó cuando acabó de subir las escaleras y salió afuera.

El otro, que estaba todavía de pie en el borde, se giró a mirar quién le había hablado.

No contestó ¿para qué iba a hacerlo si tan solo se quería ir?

-Yo lo pensaría mejor.

-¿Acaso sabes mi nombre?-preguntó sentándose en el borde, no podría ser ese día.

-Doyoung, Kim Doyoung.-contestó el chico aproximándose.

Al no obtener respuesta, decidió sentarse a su lado.

-Bueno, yo soy Yedam.-dijo sonriente mientras le tendía la mano a modo de saludo.

Doyoung no la estrechó y Yedam decidió quitarla como si nada hubiera pasado con una risa nerviosa.

-¿Realmente lo ibas a hacer?-preguntó Yedam.

-Oye mira esto es muy raro ¿sabes? Tú no me conoces.-contestó Doyoung mirándolo a los ojos

-Tú madre no lo superaría.-dijo Yedam sosteniéndole la mirada.

-¿Qué sabrás tú de mi madre?-preguntó Doyoung levantándose.

-Suelo ir a comprar a vuestra tienda y cuando estaba ella te observaba alegremente desde el mostrador mientras tú colocabas las cosas.-dijo Yedam poniéndose en pie también.

-Pero no se va a enterar Yedam. Está en coma ya...-susurró Doyoung diendo un paso hacia el borde a escasos centímetros del vacío.

-Doyoung.-Yedam no logró atraer la atención del otro.

-Las cosas desde aquí se ven distintas. Puedes observar lo que la gente hace y arrepentirte de ello. O simplemente cerrar los ojos y ...- Doyoung dio un paso más con intención de tirarse.

Yedam rápidamente lo agarró con fuerza de los brazos y tiró de él hacia atrás, consiguió empujarlo hasta la puerta de la azotea.

-¿Qué haces?-preguntó el chico que hacía unos segundos iba a tirarse al recreo desde la azotea.

-Salvarte, no puedes hacer esto.-contestó Yedam sin soltarlo.

-Solo yo puedo elegirlo.-dijo Doyoung apartándose de Yedam.

-Doyoung, hay a gente a la que le importas.-afirmó Yedam.

-¿Cómo quién?

-Como yo.-contestó Yedam mirándolo a los ojos.