Final

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Dedicado a Akabanep y a to@s l@s fans del ship.

POV Kazuo.

- Estoy embarazada.

Esas palabras retumbaron en mi mente e inconscientemente una sonrisa se formó en mis labios.

Felizmente te abracé pero tú te quedaste inmóvil. Sin decir una palabra.

-¿Sucede algo? - te pregunté. Tu mirada estaba perdida y sombría.

- Mi tía. Ella murió en el parto. Y mi madre casi me pierde durante el embarazo. Mi abuela tuvo complicaciones con los tres embarazos y partos. Kazuo. - un nudo se había creado en tu garganta y ahora tu voz estaba quebrantada.- No quiero. No quiero que nada malo le pase. No quiero perderlo. Quiero poder criarlo después del parto. Kazuo. - tus lágrimas no tardaron en salir. Te abracé fuertemente. Sin dejarte ir. Dándote apoyo en silencio.

- No lo perderás. Seguirás con vida para después criarlo como se nos de la gana. No te preocupes. Todo estará bien. Yo estaré a tu lado. Yo los protegeré.

- ¿Lo prometes? - dijiste terminando de llorar o por lo menos tratando de no seguir.

- Lo prometo.

(...)

Los nueve meses fueron un verdadero lío.

Tuve que lidiar con tu depresión preparto, con tus antojos, con tus dolores o insultos al sentirte mal, culpandome de que estuvieras en esa situación.

Al igual que debido a que no podías llegar a tu trabajo yo trabajaba horas extra para poder cubrir nuestros gastos e impuestos.

Fueron meses... Interesantes.

Estaba en el trabajo cuando Nejire, totalmente alterada me había anunciado que habías comenzado trabajo de parto.

Corrí a la oficina de mi jefe y le dije que saldría temprano para así nuevamente correr hacia el hospital en el que estabas.

Al entrar m detuve en recepción agitadamente, no podía hablar debido a la falta de aire, Kobayashi, Hanabi. Pronuncié débilmente y entrecortada.

La recepcionista buscó tu nombre y me dijo habitación 612.

Corrí hasta el elevador y presioné el número 6 de el tablero de botones.

Las puertas se abrieron y busqué con la mirada a alguien que conociera.

La encontré, era Nejire, estaba sentada con las manos en su rostro frente a tu habitación.

- Nejire.- la llamé. Ella sorprendida levantó la mirada. Sus ojos estaban rojos e hinchados. - ¿Qué sucedió? - pregunté preocupado. La expresión que ella tuvo que haber tenido era de pánico, sin saber que hacer y al verme regañarme por la tardanza, pero, era diferente.

Ella negó débilmente y sin más volvió a llorar.

- ¡Nejire!¡¿Qué pasó?!- le pregunté o más bien le grité la pregunta por los nervios y preocupación que me invadía.

- Los doctores...- habló entrecortada. - Dijeron que uno de los dos debía morir. - mi mundo paró en ese momento. No podía creerlo. No quería creerlo.- Ella dijo que el bebé viviría.

Alterado entré a la habitación escuchando los gritos de Nejire de qué no lo hiciera.

Las enfermeras empezaron a tratar de sacarme.

Gritaba tu nombre tratando de zafarme de su agarre.

- Kazuo. - tu voz era débil, más de lo normal. Tu piel estaba muy pálida y en tu rostro se notaba tu cansancio.

Formaste una sonrisa. Para después decirme te amo antes de que me sacaran de la habitación y la cerraran con llave.

No pude evitar tirarme al suelo a llorar. ¿Porque debía de suceder esto?

¿Que teníamos a el universo en nuestra contra?

3 horas después los doctores salieron a darnos las noticias. Efectivamente, habías muerto. El bebé estaba bien. A salvo. Era una niña. Fuerte y bella.

Recordé la vez que discutíamos los nombres. Si era niño le llamaríamos Akemi, y si era niña le llamaríamos Hana.

Debo de decirte que diste a luz a Hana Kobayashi. La niña más hermosa del mundo. Con el cabello negro y sus ojos morados como los tuyos.

¿Qué más puedo decirte?

La vida como padre soltero fue difícil, muyyyy difícil. Explicarle la razón por la que no tenía madre fue la que más me costó.

Pero, ella siguió adelante, ella te ama por cierto. Te concidera su heroína.

¿Qué más? Pues, ella ya tiene 8 años. Nejire y Tamaki han sido de mucha ayuda pues ellos ya tienen tres hijos y Mirio ya tiene uno. No he estado solo porque, ellos son mi familia.

Hablando de familia, la tuya realmente estuvo afectada por tu muerte así que hicieron lo posible para ayudarme.

Solo, espero que descanses en paz.

Con amor, tu esposo,
Kobayashi, Kazuo.

Dejé las cartas al lado de tu tumba, junto a las flores que Hana había llevado para ti.

Tomé la mano de nuestra hija y dejé un beso en la lápida para así, dirigirnos a nuestra casa.

Escribirte esto, era parte de mis Deseos del Corazón.

Fin.
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Weno aquí el epílogo.

¿Qué tal les pareció?

¿Les gustó?

¿Qué piensan?

Voten, comenten y compartan.

Curiosidad: Kazuo nunca volvió a casarse o encontrar a otra mujer. Su corazón siempre perteneció a su amada Hanabi.

Creo que eso es todo. Adiós.

Att. Su senpai y el viejo lesbiano.



🍂🍃kerenmoon🍂🍃

✔️Deseos Del Corazón.Where stories live. Discover now