Tamaño del problema.

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No dejo de pensar en un mañana.

Esperando, queriendo irme a casa.

Veo como el cantar de los pájaros se detiene, como sí el sonido ya no importara.

Despidiéndome de la gente triste, aunque nunca me acompañara.

Me veo en un espejo, y al mismo tiempo veo como mis ojos me engañan.

Vómito tras vómito, esperando ser aceptada.

Veo sus risas, y aunque quiera salir lo contengo.

Se que desapruebas mi actitud.

Pero tu no existes. Solo eres un producto de mi mente.

Sólo estás para no volverme loca, para no estar sola.

Esperamos juntos cada despertar, viendo si hoy es el día de atacar.

Mis pulseras ocultan mis cicatrices, aunque no de ti.

Vez mi cara y hasta sientes lástima, aunque se que no es por mi. 

Cuando quiero contratacar, me persuades y me mantengo quieta.

Pero sabes que no puedes retenerme por siempre.

Todo se  desgasta, y tus trucos también lo harán.

Ahora me temes, y eso me pone feliz.



Autora: Karen Meza.



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